El 5 de febrero de 1971 un joven Héctor Lescano, dirigente por esos tiempos de la Juventud Demócrata Cristiana (JDC), asistía a un hecho histórico para el país: la plana mayor de toda la izquierda uruguaya firmaba el acta de fundación del Frente Amplio (FA). Cincuenta años después dice ser optimista respecto al futuro de la fuerza política que durante 15 años gobernó al país.
“Hay futuro”, sentenció.
A 50 años de la fundación del FA, Lescano recuerda ese hecho “con la memoria de un acontecimiento histórico y con la memoria de medio siglo de realizaciones a favor de un Uruguay mejor”.
Recuerdo aquella mañana en que acompañamos a Juan Pablo Terra, Daniel Sosa Díaz y José Cogorno, que fueron los delegados del Partido Demócrata Cristiano al Palacio Legislativo a participar de la firma del acta de fundación”, agregó.
Señaló que el PDC “había jugado un rol muy importante en ese proceso de unidad de fuerzas, que si bien teníamos muchas diferencias en lo ideológico y en lo político, teníamos la coincidencia de que el bipartidismo histórico en Uruguay no tenía las propuestas para salir del pozo profundo en que estaba el país.
Y en la necesidad de crear una alternativa, democrática, de masas, que trabajara a favor de la unidad del pueblo uruguayo como protagonista central”.
Lescano recordó el rol del de Juan Pablo Terra en la tarea de tender puentes para unir a la izquierda. Es así que mencionó que en 1968, “en una pequeña cadena de radio y televisión”, el entonces senador Terra “había lanzado la idea de trabajar para la unidad de las fuerzas políticas democráticas, progresistas del país, con un candidato único, con un programa único”.
“Nace el Frente Amplio. Se genera, como se ha dicho, la mayor construcción política del Uruguay de la segunda mitad del siglo XX y que hasta ahora se mantiene”, subrayó. “Medio siglo después, con las realizaciones de los gobiernos nacionales y departamentales y después de haber sufrido lo que sufrió el Frente Amplio durante la dictadura, el FA sigue.
Así que es una lástima que la pandemia nos impida conmemorar, celebrar, con la trascendencia de un gran acontecimiento histórico para el país y una referencia para las fuerzas progresistas en el mundo”, agregó.
“Pero bueno, ojala más temprano que tarde llegue el momento de poder hacerlo con el pueblo movilizado, que es la forma que siempre tuvo esta fuerza desde su nacimiento”, precisó.
Tengo el honor de haber sido protagonista en aquellos años desde mi modesta militancia juvenil. De haber sido protagonista en esos años de la creación de algo que hasta ahora es, creo, único en el mundo”, subrayó.
“Hay que recordar que estábamos en plena Guerra Fría y bastante nos costó a quienes teníamos vínculos en el mundo, de un lado y otro de las grandes corrientes políticas e ideológicas del mundo, explicar por qué en este pequeño país nace esta fuerza política como respuesta al autoritarismo, como respuesta a los caprichos de un gobierno que utilizó la fuerza contra el movimiento popular y también como una alternativa popular y electoral que lamentablemente en 1973 no pudo evitar el golpe de Estado y la larga noche de la dictadura”, sentenció.
Mirando el futuro
Lescano hizo referencia al futuro de la fuerza política. Y en ese sentido señaló que “después de transitar 50 años con tantas peripecias y realizaciones, creo que el Frente Amplio nació para permanecer”.
Al futuro “lo veo con optimismo en la medida que seamos capaces de mirar con humildad y espíritu autocrítico aquellas cosas en que seguramente nos equivocamos en estos años de gobierno.
Al mismo tiempo tratar de volver a las raíces que tuvieron mucho que ver con una programa común con una expresión de unidad fuerte tanto en lo sectorial como en los movimientos de base. En el trabajo conjunto con las organizaciones populares con las cuales, sin confundir roles, tenemos tantas coincidencias para luchar por el Uruguay progresista que todos queremos”.
Precisó que en ese proceso, que “se ha iniciado y va tener este años puntos muy importantes en materia de balance, de renovación, de elecciones internas, si prima el espíritu fundacional de 1971, como espero que así sea, entonces el Frente Amplio está llamado a continuar. Ahora desde los gobiernos departamentales y nuevamente desde el gobierno nacional, para lo cual hay que trabajar mucho.
Terra decía que es bueno saber que la mística resurge. Es decir que, bien regada, la mística es un valor que puede rebrotar con más fuerza. Así que creo que por cierto hay futuro”.
Congreso y elecciones
Hizo referencia a las instancias de discusión del Frente Amplio, las que culminarán con el congreso, previsto para mediados de año.
“Estamos participando en todas las actividades y lamentablemente se ven muy limitadas y condicionadas por la situación sanitaria que vive el país, de manera que sería prematuro adelantar pronósticos”, resaltó respecto a la discusión.
No obstante, “uno siente, conversando con sectores y militantes de base y leyendo opiniones, que se va a dar un proceso que tiene que ser participativo, que tiene que ser con la máxima movilización posible, que tiene que tener la capacidad de elaborar ideas que signifiquen renovación, que junto con la autocrítica son los elementos fundamentales para una fuerza política.
Pero esa responsabilidad con el país, con representar hoy la mitad de Uruguay, con haber estado tan cerca de repetir un nuevo gobierno nacional y de pensar en la necesidad de resistir todo aquello que pueda ser una marcha atrás en la agenda de derechos, deben ser todos elementos que actúen como sostenes para ser leales a la responsabilidad que tenemos con el futuro y leales con el pensamiento fundador de aquellos gigantes de 1971”.
