Se trata de una medida de seguridad para evitar accidentes en el río. También se privilegia que los vecinos que recorran el lugar se sientan protegidos.
La Municipalidad colocó en las últimas semanas una baranda metálica de seguridad en el Paseo de la Ribera para persuadir a los visitantes a que no ingresen al río.
En el distrito existe una normativa que impide a los vecinos ingresar al agua en el Paseo de la Ribera y sobre todo en la ex zona del balneario municipal, por lo cual el Municipio colocó carteles indicativos que informan sobre la prohibición de bañarse en el lugar.
Sin embargo, en época estival no son pocas las personas que deciden trasgredir dicha norma e ingresan al río sin tener en cuenta la peligrosidad existente ya que la zona carece de playa.
Ante esta situación, el Municipio decidió colocar aproximadamente 250 metros de barandas de seguridad como parte de su plan de seguridad en la ribera pensando en los meses por venir.
Además de brindar seguridad a los vecinos y visitantes, las nuevas barandas tienen como objetivo facilitar el mantenimiento, valorizar este espacio público histórico y funcionar como nuevo balcón al río.
El paisaje del río es un privilegio inigualable que invita a descansar, relajarse, o simplemente escuchar el sonido de la naturaleza. Por eso el Municipio está trabajando para que quienes recorran el lugar se sientan cómodos, cuidados y protegidos