Susana Gimenez otorgó una entrevista donde contó detalles del proceso que vivió contra la enfermedad COVID-19 que la llevó a una internación de 15 días en el Sanatorio Cantegril de Punta del Este. La nota a Telefé Noticias llamó la atención por un enigmático tratamiento que recibió la diva.
“Al principio todos me decían que estaba todo bien, pero después nada. Y ahí dije ‘acá pasa algo’. En el Cantegril me dieron todo lo mejor que me podían dar y me salvaron en realidad dos inyecciones muy impresionantes, fuertes y caras que consiguieron en el sanatorio y me las pusieron”, dijo Susana Giménez.
En la nota, la conductora no reveló más detalles del curioso tratamiento.
TN de Buenos Aires consultó a especialistas y las fuentes aseguraron que existen “por lo menos 7 u 8 intentos de tratamiento en forma inyectable”, pero que es “imposible” saber cuál es el que le dieron a Susana si ella “no especificó el nombre”.
Frente a la curiosidad de sus seguidores, Susana se volcó a las redes sociales para aclarar los detalles del tratamiento.
“Para todos los que me preguntaron cuál es la ampolla que me dieron cuando tenía COVID-19 que me hizo tanto bien, el suero se llama Tocilizumab”, escribió en Instagram.
“Por favor tengan en cuenta que no se puede suministrar sin prescripción médica y es recomendable solo para ciertos casos e instancias del COVID-19″, añadió.
El Tocilizumab es un fármaco utilizado para tratar la artritis reumatoide que reduce 4% la mortalidad de los pacientes internados en situación grave con COVID-19, según la publicación del ensayo Recovery realizado en Reino Unido (primer país en utilizar este medicamento).
Este año, Uruguay incorporó al fármaco como tratamiento contra el COVID-19.
“Mi COVID-19 fue muy grave. Yo no me imaginé que era una cosa así porque hay gente que lo tiene de distintas maneras. Con mi hija lo tuvimos al mismo tiempo y ella no tenía tos, fiebre ni nada. Yo tuve neumonía bilateral y fue horrible. Creo que uno jamás se lo imagina y además te deja muchas secuelas”, dijo Giménez en la entrevista con Telefé.
"El peor miedo fue morirme primero y después también tenía miedo de que me intubaran.
Yo les dije si tiene que pasar eso, déjenme ir, pero me dijeron que no lo iban a hacer, que me quede tranquila”, agregó.
Después de 15 días de internación, Susana recibió el alta y se instaló en su casa La Mary junto a su familia y sus perros. Por estos días regresó a Buenos Aires pero anunció que luego de las elecciones primarias legislativas del domingo en Argentina volverá a Punta del Este.