Mostrando entradas con la etiqueta muertes. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta muertes. Mostrar todas las entradas

domingo, 6 de junio de 2021

Uruguay | Alarmantes tasas de mortalidad por COVID en las unidades de cuidados intensivos...


La pandemia tiene arrinconados a los países australes de América del sur. Uruguay ha pasado de ocupar titulares por su modélica gestión de la pandemia, a coronar el ránking de decesos por cada 100 000 habitantes en los últimos 14 días, seguido de Paraguay y Argentina. Con 3,6 millones de habitantes, Uruguay muestra valores históricos de ingresos en las unidades de cuidados intensivos, donde se registran alarmantes tasas de mortalidad. 

 "Los números que tenemos de los últimos reportes que tenemos es que ocho de cada diez pacientes intubados fallecen. Son números bastante alarmantes", dice el médico intensivista José Luis Fajardo. "Hoy fue un día bastante complicado. Hubo tres fallecimientos. Y bueno, es muy duro -se lamente la enfermera Patricia Figueroa-. _No hay conciencia, la gente no cree que esto es verdad, las personas fuera de los sanatorios, de las instituciones piensan que esto es mentira, y por la tanto no se cuidan y después terminan acá". _ Para mantener la economía, el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, preconiza la libertad responsable de los ciudadanos y se ha negado a confinar a la población pese a la presión del gremio médico y sectores de la oposición o la sociedad civil. El ritmo intenso de inmunizaciones -con un 28 % de la población totalmente vacunada - no se ha reflejado aún en la curva de contagios y muertes, como sí está ocurriendo en Chile.

viernes, 4 de junio de 2021

Cómo impactan 80 mil muertos: “Hoy el duelo no es solo por los fallecidos, es por la normalidad, el trabajo y la economía”

 

Diana Hunsche, psicóloga y especialista en duelos, señala que la pandemia de COVID-19 hizo cambiar por completo la reacción ante la pérdida de un ser querido. La imposibilidad de cumplir con los rituales y la compañía, la “culpa” del que sobrevive en una familia y cómo convivir con los que llevan el contagio a una casa
Miguel Prieto Toledo 4 de Junio de 2021 Play Entrevista a la psicóloga Diana Hunsche

 La licenciada en psicología Diana Hunsche (MN10.544), reconocida especialista en el tema de cómo transitar un duelo, situación dolorosa que cualquiera preferiría evitar, describe con cierta sorpresa un fenómeno que comenzó a observar a partir del impacto de la pandemia de COVID-19 en la Argentina y que está relacionado con la pérdida de un ser querido: algunos de sus pacientes que en este tiempo fueron golpeados de cerca por la muerte por motivos ajenos al virus, minimizaron de alguna manera -sin proponérselo- la tragedia que habían sufrido al compararse con aquellos que sí habían perdido a alguien por el coronavirus. 

 Como si de alguna manera fuese más fácil hacer el duelo al no tratarse de una víctima de la epidemia. En palabras de la propia Hunsche, “como si no fuera importante”. Sin embargo, para la experta todos los fallecimientos son de relevancia y cada uno debe ser procesado de la mejor manera para seguir adelante. Pero la pandemia cambió todo, hasta la forma de despedir a nuestros muertos y hacer el duelo. La psicóloga, que trabajó con René Favaloro en el Sanatorio Güemes, en el Hospital Zubizarreta y con el Servicio Paz y Justicia  es especialista en Psicogenealogía y dirige la revista online “Psico Herencias”. Además, es psicóloga recomendada por las Embajadas de Alemania y de los Estados Unidos.

 En el diálogo con Infobae, explicó que “Transitar un duelo depende de la persona. En realidad ahora siguen habiendo muertes por otros motivos y la gente lo dice como si fuera una muerte menos importante. Lo dicen como diciendo ´mi papá murió pero bueno, no fue por COVID´. Como si el COVID tuviera que ver con una guerra. Como si morir en una guerra fuera diferente a morir por una cuestión diabética, por ejemplo. Hay una diferenciación muy grande que se está haciendo”. En momentos en que la pandemia del COVID-19 ya se cobró las vidas de más de 80.000 argentinos -de acuerdo con el último parte oficial del Ministerio de Salud de la Nación- saber cómo llevar adelante la pérdida abrupta de un familiar o un amigo es de gran importancia para una época en la que la muerte se volvió parte de cotidianidad. 

De hecho, según admitió la profesional a este medio, en el último tiempo aumentaron las consultas por este tema. La diferencia con otros momentos acaso más normales, es que ahora procesar el adiós a un ser querido está marcado por el virus. Es la pandemia la que dicta las nuevas normas para hacer los duelos, la que marca cómo deben ser los velatorios o la que indica quién puede o no estar cerca de amigo que por cualquier motivo murió. Esto hace que el proceso sea más complejo. “El duelo que más aparece en este momento es el duelo incierto. Se llama así porque no existe el cuerpo para realizar la ceremonia de despedida. No hay ritual posible. Todas las culturas tienen un ritual que sirve para inscribir la muerte en nuestra psiquis. Sin ese registro no podemos empezar a realizar el duelo. Es un duelo donde no hay una ceremonia de despedida. Si bien nuestra parte psicológica o racional sabe que la persona que queremos falleció, nuestro inconsciente y los sentimientos se oponen a eso. Hay siempre una esperanza de que el otro vuelva. 

Es un duelo que también pasa en situaciones como un accidente aéreo o cuando no se sabe el paradero. Son duelos muy difíciles de elaborar”, dijo Hunsche a Infobae. En el mismo sentido, la licenciada señaló que en estos tiempos de pandemia, el duelo no sólo se circunscribe a la pérdida física de un pariente o un amigo. La sociedad enfrenta un duelo por todo lo que perdió: contacto físico, la normalidad laboral o simplemente salir a pasear. “El duelo es elaborar una pérdida. En este momento la palabra duelo, ya referida a la pérdida de una persona que fallece es insuficiente. La tenemos que ampliar porque todos estamos “aduelando” cosas; la cotidianidad, la normalidad, de las costumbres, cierta seguridad laboral, todo lo que tiene que ver con lo económico. 

El duelo hoy pasa a ser con un montón de situaciones. Por eso las consultas han aumentado desde que comenzó la pandemia. Estamos todos atravesados por el duelo”, agregó la profesional. Play La licenciada explica el concepto de "la culpa del sobreviviente" Por eso, como recomendación ante la tristeza de perder a alguien en este momento, especialmente en casos ocasionados por la pandemia, psicóloga aconseja que se haga una ceremonia individual con los familiares y con los amigos “para realmente despedir a ese ser y así empezar el trabajo del duelo”. Otro tipo de duelo que se manifiesta mucho en estos momentos es el llamado “múltiple”. 

Se trata de aquel cuando existe una pérdida simultánea de varias personas. Son cientos las historias de familias rotas por muertes masivas dentro del hogar. Pérdidas repentinas para las que no es está preparado. “La persona no sabe a cuál duelo prestarle atención porque está como tironeada y mareada entre tanto dolor”, añadió. Para salir adelante, Hunche es taxativa: “La única manera es con terapia y adquiriendo las herramientas necesarias para procesar el duelo. Expresarlo de alguna manera y apelar al vínculo que se tuvo con esa persona, a lo que se vivió y al recuerdo. El vínculo con la muerte no se acaba. Eso lo debe entender una persona para poder ser feliz”. La culpa del sobreviviente Hunsche, autora del libro “A terapia ¿yo?” -de reciente aparición-, desarrolló un concepto que habla de la culpa que se siente la persona que no muere.

 El familiar que “tuvo la suerte de vivir”. Se trata de un sentimiento de culpa por saber que el ser querido que falleció no podrá disfrutar ni seguir adelante. Por eso, sostuvo la profesional, hay que aprender a salir del dolor y procesarlo. Entender que aquel que sigue con vida no tiene la culpa de que la persona que quería ya no va a estar más. Si bien es un fenómeno que se intensificó en la pandemia, se trata de algo que va mucho más allá del COVID. Pero en esta época marcada por el virus, se le agregan factores como la culpa por no haber estado presente antes de la muerte o no poder despedir al ser querido porque no está permitido por una cuestión sanitaria. “Hoy hay una situación muy terrible, dolorosa. Hay mucha angustia por no poder acompañar a la persona en los últimos momentos. Existe impotencia por no haberlo podido salvar al fallecido. 

Existe bloqueo para avanzar, indignación por las circunstancias en las que murió esa persona. Mucho desamparo, soledad y dolor por las despedidas”, dijo. Vista de la zona 10 del cementerio de la Chacarita, destinada para el entierro de muertos por Covid-19 Vista de la zona 10 del cementerio de la Chacarita, destinada para el entierro de muertos por Covid-19 En esa misma dirección, la profesional prosiguió: “La culpa del sobreviviente es un concepto muy importante porque siempre la persona, cuando fallece un ser querido, siente culpa por no haberlo acompañado en eso. Es la culpa de salir adelante. 

Que fuimos favorecidos por estar vivos y que tenemos que dejar atrás a esa persona. Como que tenemos la culpa de que lo estamos abandonando cuando en realidad no lo estamos abandonando. El recuerdo es algo que podemos llevar durante toda la vida. (El psiquiatra, Jacques) Lacan decía que la verdadera muerte es el olvido, no la muerte real. Si a una persona no la olvidamos, la seguimos manteniendo viva en el recuerdo”, agregó. Hunsche habló de otro tipo de culpa y que es aún más dolorosa. Se trata de la de responsabilizar indirectamente a un familiar por contagiar y ocasionar la muerte de otro ser querido. Pese a que en la inmensa mayoría de las situaciones las infecciones de coronavirus se dan al azar y no hay nadie que “busque” contraer la enfermedad, en muchos casos las relaciones intrafamiliares se ven afectadas por casos de este estilo. “He visto casos de nietos que han contagiado a sus abuelos, que luego fallecieron. 

Eso es una culpa que también hay que elaborar. No es sólo de uno sino del grupo familiar. La gente pregunta ¿dónde te contagiaste?, ¿cómo te lo agarraste?. Hay que ayudar mucho a ese grupo familiar para salir adelante. Está la culpa de sobrevivir, la culpa por contagiar. Son muchas las cuestiones. Son fenómenos muy duros y propios de la pandemia”, concluyó la profesional, quien además cree que salir de los efectos de la pandemia tomará mucho tiempo. Pese a eso, considera también que va a dejar aspectos positivos en la sociedad después de todo. “Van a quedar secuelas de todo esto. Temor a contagiarse, estar muy pendientes de la salud, dificultad del contacto físico. El refugio en lo virtual. Pero también van a haber reacciones polarizadas. Habrá gente que tratará de vivir cosas que se perdió en el pandemia. No es la primera pandemia y en ese sentido se generan acciones solidarias. Todos estamos sufriendo por esto y hay que pensar que todos vamos a salir adelante para poder efectivamente salir adelante”, finalizó.

viernes, 21 de mayo de 2021

La OMS estima que las cifras reales de muertos por la covid-19 duplican o triplican a las oficiales

 

Las estimaciones sugieren que al menos tres millones de personas fallecieron por el virus en 2020
AGENCIAS Madrid - 21 MAY 2021 - 12:20 GMT-3 La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha estimado que las cifras reales de muertos por la covid-19 duplican o triplican a las oficiales, entre 6 y 8 millones de fallecidos, frente a los 3,4 millones registrados, según el Informe de Estadísticas Sanitarias Mundiales de 2021. Las estimaciones preliminares sugieren que el número de muertes en el mundo atribuibles a la pandemia en 2020 es de al menos tres millones, lo que representa 1,2 millones de decesos más que los 1,8 millones reportados oficialmente.

 En América, el número real de muertes relacionadas con la enfermedad se habría situado en 2020 entre 1,2 y 1,5 millones, en lugar de las 900.000 reportadas, según las estimaciones realizadas por la OMS en el marco de la preparación de sus Estadísticas Sanitarias Mundiales y que se basan en gran medida en modalizaciones matemáticas. En Europa los decesos se habrían situado entre 1,1 y 1,2 millones, es decir, el doble de las 600.000 registrados. “Las muertes directas por la covid-19 representan una fracción del verdadero impacto que ha tenido la pandemia”, ha declarado el analista de datos de la OMS, William Msemburi. 

La estimación se ha realizado teniendo en cuenta principalmente el número total de fallecidos que se podían haber esperado en función de la evolución de la mortalidad observada en años anteriores, una cifra que se ha visto alterada por la pandemia. “Los reportes ofrecen una foto incompleta de la situación, entre otras cosas porque mucha gente murió antes de poder someterse a un test de covid”, ha explicado Msemburi. América y Europa son las regiones que ofrecen información más completa sobre las tasas de mortalidad a nivel nacional en 2020. 

Las estadísticas muestran que el año pasado hubo tres millones de muertes adicionales en el mundo, con respecto a los 1,8 millones de decesos atribuidos directamente a la covid-19 hasta diciembre. Según la OMS, el 40% de los países registran al menos el 90% de las muertes y sus causas. Existe la certeza de que muchas personas murieron por el impacto de la pandemia en los sistemas sanitarios, que tuvieron que interrumpir los tratamientos de enfermos crónicos y limitar al máximo la atención de pacientes. Además, Msemburi ha explicado que la emergencia del coronavirus disuadió o impidió que otros acudieran a los hospitales. La pandemia también ha evitado decesos. Han fallecido menos personas por gripe al reducirse los contactos sociales y también se han producido menos muertes en carretera al limitarse la movilidad.

jueves, 20 de mayo de 2021

Coronavirus: Argentina hoy es el país con más muertes por millón de habitantes

 

El país es líder en decesos por día: según registros del sitio especializado Our World in Data, contabiliza 16,46 muertes por COVID-19 por millón y supera a Brasil, que registra 11,82 por millón. Ayer hubo récord de contagios con casi 40.000 infectados
La segunda ola de COVID-19 está haciendo estragos en Argentina desde hace ya varios días consecutivos. Anteayer hubo récord de muertos (745) y ayer hubo récord de contagios con casi 40.000 infectados. Además, el fin de semana, nuestro país superó los 70.000 muertos en medio de la lenta Campaña Nacional de Vacunación y de las restricciones de circulación vigentes desde el 16 de abril pasado. Los casos han aumentado de un total diario de alrededor de 5000 a principios de marzo a un récord de 35.000 esta semana, mientras que las muertes aumentaron de 112 a principios de marzo a un récord de 745 el martes. 

Las cifras colocan al país en tercer lugar en casos diarios después de India y Brasil, y cuarto en muertes por COVID, después de India, Brasil y Estados Unidos, según datos del sitio especializado Our World in Data y analizados en una publicación en The Guardian por el periodista argentino Uki Goñi. En relación con la población, y siempre con datos analizados del sitio web, Argentina ahora tiene el mayor número de muertes por coronavirus por día en el mundo, con 16,46 muertes por COVID-19 por millón el martes, superando con creces a su vecino gigante Brasil, que registró 11,82 por millón. Las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) ya están al límite en todo el país, con más del 90% de las camas con respirador ocupadas en Buenos Aires, Córdoba, Neuquén y CABA, según un censo realizado la semana pasada por la Sociedad Argentina de Cuidados Intensivos (SATI). 

 La llegada de vacunas a cuentagotas y la consiguiente lenta campaña de vacunación nacional en el país genera un panorama preocupante con pocas personas vacunadas y muchos contagios y muertes diarias. Según datos oficiales del Ministerio de Salud, al día de hoy se aplicaron sólo 10.549.521 vacunas de las cuales 8.397.337 son personas que recibieron una sola dosis (18,5% de la población) y 2.152.184 personas recibieron las dos dosis (4,74% de la población). De acuerdo con la información recopilada por la Unidad de Datos de Infobae -en función de los números provistos por la Universidad de Johns Hopkins- nuestro país se ubica en cuarto puesto de mortalidad por millón de habitantes en América del Sur. 

En esta escala, en la que se pone el número bruto (cantidad de muertos) en relación con la densidad demográfica del país (millones de habitantes), la lista la encabezan Brasil, que tiene 2.084 fallecidos por millón de habitantes; Perú, 2.070; y Colombia, 1.642. Más abajo se ubican Chile, 1.491; Bolivia, 1.195; Ecuador, 1.162; Paraguay, 1.090; Uruguay, 1.021 y, por último, Venezuela, 84. “Argentina se encuentra en una situación de colapso sanitario. Nuestros hospitales están desbordados y el eslabón débil de la cadena son nuestras unidades de vehículos intensivos, que tienen insuficientes recursos tecnológicos y humanos, insumos o medicinas”, explicó el doctor Arnaldo Dubin, médico intensivista en La Plata.

 “El marcador de este colapso es el aumento abrupto de la mortalidad: algunas regiones están reportando una tasa de mortalidad del 65% en cuidados intensivos”, agregó el experto que observa como los pacientes argentinos de coronavirus se están desbordando en las UCI improvisadas instaladas en salas de pediatría o cardiología y, a veces, incluso en los pasillos de los hospitales. Consultado por Infobae, el doctor en medicina y ex titular del PAMI Carlos Javier Regazzoni, manifestó: “Argentina, con la marca de 70.000 muertos por el COVID-19, se ubica entre los países más castigados del mundo por esta enfermedad. Llevamos 16 meses a lo largo de los cuales se han repetido errores de diagnóstico que impidieron hacer los cambios sustanciales que este contexto requería”. 

 Si hablamos de la tasa de letalidad, es decir el porcentaje de muertes sobre diagnósticos positivos de COVID-19, Argentina está mucho mejor posicionada, tanto en América del Sur como a nivel mundial. Con una cifra de 2,13%, en nuestro país se mueren aproximadamente 2 personas de cada 100 que se contagian. En Sudamérica, en función de los números provistos por la Universidad de Johns Hopkins y recopilados por la Unidad de Datos de Infobae, la tasa de letalidad más alta la tiene México (9,25%). Lo siguen Ecuador (4,82%), Bolivia (4,05%), Perú (3,51%), Brasil (2,79%), Colombia (2,61%), Paraguay (2,44%) y Chile (2,16%). 

Un puesto más abajo de este último se ubica Argentina y, más abajo aun, Venezuela (1,11%). En este contexto, vale destacar que, hasta el momento, Argentina logró atravesar la primera ola y lo que va de la segunda sin provocar un colapso de su sistema sanitario. Bien diferente a lo que sucedió en Brasil que, en marzo pasado, atravesó la peor crisis con los hospitales saturados y récord de contagios y muertes diarias por coronavirus. SEGUIR LEYENDO: Alerta en el Gobierno: el promedio de nuevos casos diarios en todo el país aumentó el 33% en los últimos siete días Coronavirus: tras el récord de muertes, Argentina quedó en el cuarto puesto de fallecidos por millón de habitantes en América del Sur

miércoles, 12 de mayo de 2021

Los estragos del coronavirus en la India: decenas de cadáveres flotan en el Ganges


LUCKNOW.- Decenas de cadáveres llegan a las orillas del Ganges ante una tasa de decesos y cremaciones de alrededor de 4000 personas al día a causa del coronavirus en la India. India actualmente representa una de cada tres de las muertes reportadas por Covid-19 a nivel global, según un recuento de Reuters, y su sistema de salud está abrumado, a pesar de las donaciones de cilindros de oxígeno y otros equipos médicos de todo el mundo. Las zonas rurales de la India no sólo tienen una atención médica más rudimentaria, sino que ahora también se están quedando sin madera para las cremaciones hindúes tradicionales. Cremaciones masivas en Nueva Delhi 

Autoridades dijeron el martes que estaban investigando el hallazgo de decenas de cuerpos encontrados flotando en el Ganges en dos estados. “A partir de ahora es muy difícil para nosotros decir de dónde provienen estos cadáveres”, reconoció MP Singh, el principal funcionario del gobierno en el distrito de Ghazipur, en Uttar Pradesh. Akhand Pratap, un residente local, dijo que “la gente está sumergiendo los cuerpos en el río sagrado Ganges en lugar de incinerarlos debido a la escasez de madera para incinerar”. Incluso en la capital, Nueva Delhi, muchas víctimas de Covid son abandonadas por sus familiares después de la cremación, dejando que sean voluntarios quienes lavan las cenizas, rezan por ellos y luego las esparcen por el río en la ciudad santa de Haridwar, a 180 kilómetros de distancia.

 “Nuestra organización recolecta estos restos de todos los crematorios y realiza los últimos rituales en Haridwar para que puedan lograr la salvación”, dijo Ashish Kashyap, voluntario de la organización benéfica Shri Deodhan Sewa Samiti. El promedio de siete días de infecciones diarias alcanzó un récord de 390.995 el martes, con 3.876 muertes, según el Ministerio de Salud. Las cifras oficiales de decesos, que según expertos son casi ciertamente inferiores a la real, ascienden a poco menos de un cuarto de millón. La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo ayer que la variante B.1.617, identificada por vez primera en India, fue clasificada como una variante de preocupación mundial y que había estudios que sugerían que era más transmisible.

Noticias que interesan