Mostrando entradas con la etiqueta estudios. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta estudios. Mostrar todas las entradas

sábado, 20 de noviembre de 2021

Comunicamos a la Colectividad Uruguaya y compatriotas que viajen desde Uruguay


 



A través de la Gestión de nuestra compañera Fernanda Negrete de logra un descuento excelente para Uruguayos en los PCR para quienes viajen en el orden de los 4.500 pesos Argentinos lo que significa un ahorro importante para nuestros compatriotas tanto para quiene van hacia a Uruguay u otros Países como también para quienes llegan desde Uruguay a visitar su familia o simplemente lleguen como turistas. También destacamos la opción para quienes no tienen obra social se les ofrece un chequeo por un pago de 1.500 pesos Argentinos, por dudas y mas información

martes, 20 de julio de 2021

Qué está haciendo la ciencia para rediseñar las vacunas de COVID-19 frente a las nuevas variantes

 Las variantes capaces de eludir la inmunidad están alentando a que los fabricantes de vacunas se replanteen el rediseño de sus fórmulas. ¿Cómo se actualizarán?

Todas las pruebas apuntan a que las nuevas variantes del SARS-CoV-2 están progresando en su capacidad por eludir la inmunidad producida por vacunación o infecciones previas, por lo que los científicos comienzan a plantearse el rediseño de las vacunas que se están distribuyendo por todo el mundo.

 Continúa el debate sobre la posible disminución de la eficacia de esta primera generación de vacunas para combatir COVID-19 debido a las nuevas variantes. Pero algunos desarrolladores han lanzado planes de actualización de sus inyecciones para que también actúen sobre las variantes emergentes. Estas cepas llevan mutaciones que parecen reducir el efecto de los anticuerpos cruciales para repeler la infección. También se contempla que las vacunas contra la COVID-19 tengan que actualizarse con regularidad, como ocurre con la gripe. Para Mani Foroohar, analista de biotecnología en el banco de inversiones SVB Leerink, en Boston, el mejor y más inmediato modo de combatir la amenaza de las variantes emergentes “probablemente siga siendo vacunar con rapidez a tantas personas como sea posible con las dosis actuales.

 Hay que pinchar muchos brazos para ahogar a este virus antes de que vuelva a estallarnos en la cara”. ¿Necesitaremos actualizar las vacunas? La viróloga Kanta Subbarao, del Instituto Peter Doherty para Infección e Inmunidad de Melbourne, piensa que “todo apunta en este sentido”. Los laboratorios del planeta compiten por desvelar la amenaza que las variantes emergentes del coronavirus suponen para las vacunas. Pero los primeros datos de estos estudios aparecen desiguales e incompletos. 

Entre las variantes más preocupantes se encuentran la identificada a finales de 2020 en Sudáfrica, denominada 501Y.V2 (también conocida como variante B.1.351). En los ensayos de laboratorio se halló que portaba mutaciones que amortiguaban la potencia de los “anticuerpos neutralizantes” que inactivan el virus, elaborados por quienes recibieron las vacunas de ARN de Pfizer o de Moderna. “No está claro que estos cambios sean suficiente para disminuir la eficacia de dichas vacunas -comenta Subbarao-. Es la pregunta del millón, porque no sabemos cuántos anticuerpos se necesitan”.

 Las vacunas provocan otras respuestas inmunitarias que podrían ayudar a proteger de los efectos de las variantes. En enero pasado, la firma biotecnológica Novavax liberó datos de ensayos clínicos que demostraban que su vacuna experimental, diseñada para combatir el virus original, tenía una eficacia en torno al 85% contra la variante identificada en el Reino Unido, pero la eficacia descendía al 50% frente a la 501Y.V2. 

Esta caída preocupa a los investigadores, porque indica que la 501Y.V2 y otras variantes parecidas provocarán una pérdida de eficacia significativa en las vacunas. El virólogo Paul Bieniasz, de la Universidad de Rockefeller en Nueva York, que codirigió uno de los estudios sobre la neutralización con anticuerpos, cree que “la actualización parece inevitable para mantener en plena forma la eficacia de las vacunas. Las incógnitas son con qué frecuencia y en qué momento”. ¿Cómo se debería decidir el momento de actualizarlas? Los científicos, los profesionales de la salud y los fabricantes de las vacunas están comenzando a abordar el tema. Se está empezando a vislumbrar cómo se altera la respuesta de las vacunas en función de las diferentes mutaciones, y cómo se diseminan estas mutaciones gracias a las fuerzas evolutivas.

 “Desde luego, yo no las actualizaría ahora”, afirma Bieniasz. Subbarao, desde la dirección del Centro Colaborador de la Organización Mundial de la Salud para Referencia e Investigación de la Gripe, en Melbourne, propone que la vacuna contra la gripe estacional sería el modelo que debe seguirse para las actualizaciones de la vacuna contra la COVID-19. En centros como el suyo se vigila si hay cambios genéticos en las cepas emergentes del virus de la gripe que pudieran influir en la eficacia de las vacunas. Se estudia con anticuerpos de hurón y de humano para determinar si la nueva cepa consigue eludir la vacuna de la temporada anterior y que, por lo tanto, necesita una actualización. 

Subbarao comenta que “estas revisiones se llevan a cabo cada año en la temporada de gripe de cada hemisferio, y los cambios se implantan solo cuando se ha diseminado una cepa que elude la inmunidad de las vacunas. Si está localizada en una región o país, no se modificará el compuesto para todo el hemisferio”. Por lo general, la magnitud del umbral para actualizar las vacunas contra la gripe es la misma que para los cambios en la respuesta de neutralización con anticuerpos que los investigadores han relacionado con la variante 501Y.V2. 

Pero no está todavía claro cómo esta deriva, junto a la distribución geográfica de las diferentes variantes y mutaciones, cómo alertará sobre cuándo habrá que actualizar la vacuna contra la COVID-19. Para Subbarao, “estos debates no han hecho más que empezar. No podemos perseguir cada variante que aparezca”. ¿Cómo se actualizarán las vacunas? Esta es otra incógnita. Algunas vacunas anticovídicas, entre ellas las fabricadas por Moderna, Pfizer y AstraZeneca, llevan las instrucciones para que las células sinteticen la proteína de la espícula del virus, que es la diana clave del sistema inmunitario contra ellos.

 Las variantes como la 501Y.V2 llevan mutaciones en la espícula que alteran algunas regiones reconocidas por los anticuerpos neutralizantes. Una posibilidad consiste en cambiar las vacunas que contienen las versiones viejas de la espícula (basadas sobre todo en el primer virus que se identificó en Wuhan) por una molécula actualizada que tenga los cambios aminoacídicos específicos que obstaculizan la respuesta con anticuerpos. 

Pero antes, los investigadores tendrán que determinar si tales cambios alteran o repercuten en la reacción del sistema inmunitario ante la vacuna. Otra posibilidad consistiría en incluir en el mismo pinchazo la forma nueva y la antigua de la proteína de la espícula, o sea, convertirla en una vacuna polivalente. En Moderna han comenzado a trabajar en la actualización de su vacuna de ARNm para que contenga la espícula mutada como en 501Y.V2. En una conferencia con inversores, Tal Zaks, responsable científico de esta compañía biotecnológica, con sede en Cambridge, Massachusetts, informó que también están probando la eficacia de una tercera dosis con el coronavirus original, y que se están planteando una vacuna polivalente.

 Pero Subbarao indica que “antes de decantarse por una de estas opciones, tendrán estudiar cómo responden los animales, y probablemente los humanos, a cualquier posible actualización de la vacuna. No bastará con alterar el aminoácido de una posición y suponer que resultará exitoso”. ¿Cómo se estudiarán y autorizarán las vacunas? Los desarrolladores pusieron a prueba las vacunas por ahora en ensayos de fase III con decenas de miles de participantes antes de que los organismos reguladores les autorizasen un uso farmacológico.

 “Pero esta clase de comprobación para una vacuna reformada sería lenta y difícil ahora que la primera generación de vacunas se está desplegando por todo el mundo -afirma el inmunólogo Drew Weissman, de la Universidad de Pensilvania en Filadelfia-. No logro imaginarme cómo se haría un ensayo de fase III para una variante”. Se desconoce cuántos datos clínicos habrá que aportar para homologar una actualización. Si bien las nuevas vacunas contra la gripe estacional no suelen necesitar ensayos nuevos, las autoridades sanitarias no tienen la garantía de décadas de experiencia y de datos clínicos para las vacunas contra COVID-19. Según Weissman, “como es totalmente nueva, habrá que montar un par de ensayos clínicos”. 

 El tamaño y la duración de estos testeos dependerá de si los investigadores encuentran indicadores de protección: rasgos medibles de una respuesta inmunitaria (por ejemplo, una concentración concreta de anticuerpos neutralizantes) que sirvan de marcadores de la protección frente a COVID-19. Con ellos, no habría que esperar a que los participantes de los ensayos se infectaran con el coronavirus para saber si funcionan las vacunas, pues bastaría con medir la respuesta inmunitaria después de cada dosis. “No tenemos ninguna garantía de que aparezca un indicador robusto -dice el especialista en vacunas Paul Offit, del Hospital Infantil de Filadelfia en Pensilvania- Pero incluso sin un marcador claro, se conseguiría demostrar que la nueva vacuna produce una cantidad de anticuerpos similar a la de la primera generación”. 

Desde Moderna informan de que esperan que los ensayos clínicos en los que participan cientos, cuando no miles, de personas les sirvan para seguir adelante con su vacuna contra la variante 501Y.V2. Foroohar imagina que la compañía tardará unos cinco meses para pasar de producir la nueva vacuna a someter los datos de sus ensayos a las autoridades sanitarias. ¿Cómo responderá la gente ya inmunizada a las vacunas actualizadas? No se sabe aún cómo alguien que ha sido inmunizado con una vacuna de la primera generación responderá a una nueva contra una variante emergente. Los inmunólogos llevan tiempo observando que las personas tienden a montar una respuesta inmunitaria más robusta contra la primera variante de un patógeno que contra las posteriores. 

Este fenómeno indicaría que las vacunas actualizadas quizá desencadenen respuestas inmunitarias más amortiguadas que las de la primera vacuna. Weissman teme que “la dosis contra una variante no provea de una nueva respuesta contra ella, y que solo se potencie la primera respuesta”. Pero también sostiene que “hay pruebas de que las vacunas de ARN no caen presas de esta tendencia. Por razones que no están nada claras, algunas vacunas de ARN desencadenan respuestas sorprendentemente complejas que dan como resultado anticuerpos que actúan sobre regiones de las proteínas víricas que a menudo no se detectan en respuesta a otra clase de vacunas. Y esto podría significar que las vacunas de ARN también tendrán una mayor capacidad de acción sobre los cambios presentes en una variante”.

jueves, 24 de junio de 2021

De interés para jóvenes interesados en continuar sus estudios

 

De interés para jóvenes interesados en continuar sus estudios La Intendencia de Colonia, a través del Departamento de Desarrollo Humano y Juventud de Colonia, junto a la Fundación Chamangá, interesados en continuar brindando oportunidades en educación a los jóvenes del departamento, comunica a jóvenes que estén interesados en continuar sus estudios relacionados con su vocación, ya sea en áreas técnicas, docentes, científicas y profesionales; que aporten al desarrollo social, cultural y económico del departamento de Colonia y el Uruguay, que se está brindando la posibilidad de contar con apoyo económico y seguimiento educativo, psicológico y social. 

 REQUISITOS: l Tener entre 18 y 30 años de edad cumplidos a la fecha de cierre del llamado (31/08/2021) l Aportar pruebas de su vocación para cualquier tipo de arte, oficio o profesión. l Presentar escolaridad de los 3 últimos años de formación educativa formal y otras pruebas de vocación l Demostrar dificultades económicas y/o familiares para comenzar o continuar con los estudios. l Ser ciudadano/a uruguayo/a residente en el país.

 EL PERÍODO DE INSCRIPCIÓN SE EXTENDERÁ DESDE EL 1º DE JUNIO HASTA EL MARTES 31 DE AGOSTO DE 2021 INCLUSIVE. Puedes retirar el formulario en: l Dirección de Desarrollo Humano y Juventud, Avda. Artigas 327, tel. 452-25336/ 26250 o por correo electrónico: juventud@colonia.gub.uy. l Sitio web: www.fundacionchamanga.org.uy Por más información dirigirse a: Dirección de Desarrollo Humano y Juventud, Avda. Artigas 327, tel. 452-25336/ 26250, correo electrónico: juventud@colonia.gub.uy en el horario de 12:15 a 17:00. Fundación Chamangá, tel. 29004360 o 098917809 de lunes a viernes de 13:00 a 17:00 horas o por e-mail: vocacion@fundacionchamanga.org.uy-Facebook:./FundacionChamanga

jueves, 29 de abril de 2021

Fatiga del Zoom: las razones que intentan explicarlo

 


CALIFORNIA (Infobae) - Un estudio realizado por la Universidad de Stanford, en los Estados Unidos, se refiere a la sobrecarga no verbal e indica que es posible que las personas estén participando de más reuniones virtuales que a las que asistirían de modo presencial. Durante décadas, los académicos han predicho que la tecnología de videoconferencia interrumpirá la práctica de viajar diariamente hacia y desde el trabajo y cambiará la forma en que las personas socializan. 

En 2020, la pandemia de COVID-19 obligó a un aumento drástico en el número de reuniones por videoconferencia. Si bien el software ha sido una herramienta esencial para la productividad, el aprendizaje y la interacción social, algo acerca de estar en videoconferencia todo el día parece particularmente agotador, y el concepto "Zoom Fatigue" (fatiga del Zoom) se hizo popular rápidamente. "Mi análisis -indica Jeremy Bailenson, director fundador del Laboratorio Virtual de Interacción Humana de la Universidad de Stanford, autor de una reciente investigación-, se centra en la sobrecarga no verbal como una posible causa de fatiga y cómo varios aspectos de la interfaz de Zoom actual probablemente conduzcan a consecuencias psicológicas.

 En lugar de acusar al medio, el objetivo es señalar estos defectos de diseño para aislar áreas de investigación para los científicos sociales y sugerir mejoras de diseño para los tecnólogos". En 2020, la videoconferencia fue una herramienta fundamental que permitió a las escuelas y muchas empresas continuar trabajando. Varias plataformas ayudaron a millones de personas, al hacer que las videoconferencias fueran gratuitas y fáciles de usar. Además, si la práctica de asistir a reuniones perdura después de la pandemia, el consumo de combustibles fósiles debería disminuir debido a una reducción en los desplazamientos físicos. 

Por ejemplo, un estudio demostró que la videoconferencia usa menos del 10% de la energía requerida para una reunión en persona. Si bien hay docenas de estudios empíricos en psicología, interacción humano-computadora y comunicación que examinan el comportamiento durante las videoconferencias, aún no se han realizado estudios rigurosos que examinen las consecuencias psicológicas de pasar horas al día en este medio en particular. "A diferencia de hablar de videoconferencias en general -explica el autor-, me centro en Zoom en particular. Soy un usuario frecuente de esta herramienta y estoy agradecido por el producto que ayudó a mi grupo de investigación a mantenerse productivo y permitió que amigos y familiares se mantuvieran conectados. Pero, dado que se ha convertido en la plataforma predeterminada para muchos en el mundo académico, tiene sentido centrarse en él, que pasó de unos 10 millones de usuarios en diciembre de 2019 a más de 300 millones de usuarios cinco meses después. Además, la ubicuidad del software ha dado lugar a la aparición del genérico, y muchos utilizan la palabra 'Zoom' como un verbo para reemplazar la videoconferencia".

 Las primeras investigaciones sobre el comportamiento no verbal documentaron el compromiso entre la mirada y la distancia interpersonal. Las investigaciones han replicado estos hallazgos con rostros virtuales, en el sentido de que las personas darán más distancia interpersonal cuando se acerquen a humanos virtuales que están manteniendo la mirada virtual en comparación con los que no lo hacen. En Zoom, el comportamiento que normalmente se reserva para las relaciones cercanas, como los largos períodos de mirada directa a los ojos y rostros vistos de cerca, de repente se ha convertido en la forma en que se interactúa con conocidos casuales, compañeros de trabajo e incluso extraños. Hay dos componentes: el tamaño de las caras en la pantalla y la cantidad de tiempo que el espectador está viendo la vista frontal de la cara de otra persona que simula el contacto visual. "El tamaño de las caras en una pantalla -dice Bailenson- dependerá del tamaño del monitor de la computadora, qué tan lejos se sienta uno del monitor, la configuración de vista que elija en Zoom y cuántas caras hay en la cuadrícula. En las reuniones individuales realizadas a través de Zoom, los compañeros de trabajo y amigos mantienen una distancia interpersonal reservada para sus seres queridos". 

 En la investigación se han hecho cálculos similares con interacciones grupales, y aunque estas medidas siguen siendo informales, este patrón no parece cambiar a medida que aumenta el tamaño del grupo. En las cuadrículas de Zoom, las caras son más grandes en el campo de visión de lo que son cara a cara cuando se tiene en cuenta cómo los grupos se espacian naturalmente en las salas de conferencias físicas. "Cualquiera que hable para ganarse la vida comprende la intensidad de ser mirado durante horas", sentencia el especialista. En la interacción cara a cara, la comunicación no verbal fluye de forma natural, hasta el punto en que rara vez se presta atención consciente a los gestos y otras señales no verbales. En Zoom, el comportamiento no verbal sigue siendo complejo, pero los usuarios deben esforzarse más para enviar y recibir señales.

 Durante una videollamada, los usuarios se ven obligados a monitorear conscientemente el comportamiento no verbal y a enviar señales a otros que se generan intencionalmente. Los ejemplos incluyen centrarse en el campo de visión de la cámara, asentir de manera exagerada durante unos segundos más para indicar que está de acuerdo o mirar directamente a la cámara (en lugar de las caras en la pantalla) para intentar hacer contacto visual directo al hablar. Zoom permite a las personas de alguna manera reducir la cantidad de monitoreo; por ejemplo, las personas no deben preocuparse por los movimientos de las piernas dado que no están frente a la cámara. 

 Otro punto se relaciona con la recepción de señales. En una conversación cara a cara, las personas extraen un gran significado de los movimientos de la cabeza y los ojos, que ayudan a señalar el cambio de turno, el acuerdo y una serie de señales afectivas. ¿Qué sucede cuando estas señales están presentes y son percibidas por otros conversadores pero no están ligadas a la intención de la persona que hace el gesto? En muchos sentidos, en una videollamada la mirada es perceptualmente realista, pero no socialmente realista. "Los usuarios calificaron la condición de mirada aumentada con los niveles más bajos de presencia social -indica el catedrático-. Por ejemplo, los participantes no se sintieron 'en sintonía' con los oradores y no sintieron que la interacción fue fluida". Los usuarios de Zoom se enfrentan a menudo a esta desconexión. Por ejemplo, en una reunión cara a cara, una mirada rápida y de reojo en la que una persona mira a otra tiene un significado social, y una tercera persona que observa este intercambio probablemente codifica este significado. En Zoom, un usuario puede ver un patrón en el que en su cuadrícula parece que una persona mira a otra. Sin embargo, eso no es lo que sucedió realmente, ya que las personas a menudo no tienen las mismas redes. Incluso si las cuadrículas se mantuvieran constantes, es mucho más probable que la persona que mira haya recibido un recordatorio de calendario en su pantalla o un mensaje de chat. Los usuarios reciben constantemente señales no verbales que tendrían un significado específico en un contexto cara a cara, pero que tienen diferentes significados en Zoom. "Si uno tuviera que contar las similitudes entre los dos, superarían con creces las diferencias -advierte Bailenson-.

 De hecho, el éxito de este medio, como muchas tecnologías, gira en torno a su capacidad para imitar a la perfección conversaciones cara a cara. Además, independientemente del medio, es importante reconocer que las reuniones en general pueden ser bastante agotadoras, al igual que los desplazamientos de un lugar a otro, lo que Zoom elimina. Quizás un factor de la fatiga de Zoom es simplemente que estamos asistiendo a más reuniones de las que estaríamos haciendo cara a cara". Durante décadas, los académicos han predicho que la tecnología de la comunicación interrumpirá la práctica de ir y venir del trabajo diez veces por semana. Incluso cuando las reuniones cara a cara vuelvan a ser seguras, es probable que la cultura finalmente haya cambiado lo suficiente como para eliminar algunos de los estigmas que se tenían anteriormente contra las reuniones virtuales. Foto: (REUTERS) © 2019 Infobae UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias

Noticias que interesan