Andrea
García
La
Secretaria de Desarrollo Humano detalló el sistema de entrega de
colchones y materiales a los afectados por la lluvia y las
inundaciones. Dio a conocer demoras por parte de las fábricas
colchoneras, ante el incremento de la demanda en toda la Provincia, y
aclaró que el Municipio “no realiza convocatorias ni reuniones
para brindar asistencia. El trabajo se realiza puerta a puerta, e
incluye a todos los vecinos”.
1628
familias afectadas por las lluvias y las inundaciones son las que
necesitan ayuda. Las mismas, habitan los barrios San Cayetano, Santa
Lucía y San Felipe. Las cifran, son el resultado de un intensivo
trabajo desarrollado por el Municipio y el cuerpo de voluntarios, en
el marco del programa “Regreso a Casa”, impulsado días pasados
por la Intendente Municipal, Stella Maris Giroldi.
Al
respecto, la Secretaria de Desarrollo Humano Municipal, Andrea
García, brindó detalles de la continuidad de dicho programa,
especialmente en lo que representará la entrega de asistencia
(colchones y materiales, principalmente) a quienes han sufrido
pérdidas de esta índole.
“En
cuanto a colchones, una parte importante la compra el Municipio, pero
además estamos recibiendo donaciones de algunas empresas” dijo
García, quien explicó que las empresas fabricantes de colchones no
cuentan con toda la producción necesaria, y se limitan a entregar
500 colchones por semana, teniendo en cuenta que hay 38 Partidos
bonaerenses afectados por la misma situación, a los cuales dichas
empresas también abastecen.
“En los
próximos días comenzará una entrega periódica, segmentada por
sectores de los distintos barrios, a medida que sea recibida la
producción” expresó la Secretaria de Desarrollo Humano, al tiempo
que aclaró que “junto a los colchones, se entregarán otros
materiales también necesarios, que fueron relevados en los censos
realizados en las zonas afectadas”.
“A
través del programa “Regreso a Casa”, impulsado por la
Intendente, estamos tomando contacto directo con cada uno de los
damnificados, yendo casa por casa” aseguró la funcionaria, quien
aclaró: “el Municipio no ha entregado colchones hasta el momento.
Si algunos Partidos políticos entregaron unos 50 colchones.
Cualquier institución puede si quiere hacer una entrega parcial en
base a una necesidad total. Nosotros como Estado y Municipio no
podemos darnos ese lujo, debemos ser igualitarios y equitativos. En
el mismo momento que recibe una familia, también debe hacerlo su
vecino. No podemos entregarle a algunas personas porque tengo la
ayuda, y a otras no porque aún no la tengo. Hay una responsabilidad
de llegar a todos por igual” aseveró.
Por otra
parte, desmintió la supuesta convocatoria a una reunión en el Bº
San Cayetano. “Hemos escuchado versiones o comentarios, sobre
supuestas reuniones con grupos de vecinos de los que participaría
este Municipio. Cabe aclarar que todas las comunicaciones que tenemos
con nuestros vecinos, ya sea en San Cayetano, Santa Lucía, o
cualquier sector donde estemos brindando asistencia, las hacemos de
forma directa, casa por casa. De darse este tipo de convocatorias,
estaríamos llegando a unas cien o doscientas familias, cuando
tenemos más de mil afectados. Y entonces la ayuda no llegaría a
todos por igual. Por eso es un trabajo que realizamos puerta a
puerta. No hacemos convocatorias donde algunos puedan ir y otros no.
El Estado debe ser igualitario para todos, de acuerdo a las
necesidades”.
En
cuanto a la entrega de colchones y materiales, en base a las
encuestas realizados en las zonas afectadas, puntualizó que la misma
se concretará “a través de las instituciones que formaron parte
del voluntariado convocado por la Intendente, en el marco del
programa Regreso a Casa, con la Cruz Roja a la cabeza dado el rol y
la capacidad con la que cuenta en este tipo de desastres naturales.
Queremos que todos aquellos que han colaborado en esta situación,
vean la transparencia de nuestro trabajo y de que manera se entrega
la ayuda reunida”.
Finalmente,
destacó el intenso y productivo trabajo realizado en los barrios con
la confección de las encuestas, que tuvo posteriormente un equipo de
ocho personas abocadas a la carga de la información que luego se
tradujo en ayuda concreta. “Cada planilla representa para nosotros
ni más ni menos que una familia. Y a esa familia hay que prestarle
la debida atención para ver de que manera acercarle la ayuda, lo
antes y mejor posible, para que puedan salir adelante” concluyó
Andrea García.