domingo, 2 de mayo de 2021

Un corazón de 503 gr, cirrosis, un posible Parkinson y sin “pleno uso de sus facultades mentales | Por Hugo Martin

El informe de los peritos de la Junta Médica sobre la muerte de Diego Armando Maradona revela todos los padecimientos que tuvo el astro hasta su fin el 25 de noviembre de 2020. Ponen la lupa sobre las malas decisiones del equipo médico y enumeran, una a una, las enfermedades que afectaron sus órganos. Un testimonio impactante sobre su salud autor Por Hugo Martin

 


Duele. Y cómo. Repasar todas las dolencias físicas de Diego Armando Maradona es recorrer un campo de batalla. Palpar el desarrollo de una guerra de la que siempre creímos que saldría victorioso, con el 10 en la espalda. El 25 de noviembre de 2020, la realidad nos pegó un cachetazo. La lógica se impuso. Maradona era un hombre enfermo. Y murió. Parece una cruel ironía, pero los integrantes de la Junta Médica que prepararon el informe sobre las causas de su fallecimiento son 11, como un equipo de fútbol. En las 70 páginas que elaboraron para los fiscales Cosme Iribarren, Patricio Ferrari y Laura Capra detallan el final. Aseguran que Maradona “comenzó a morir, al menos, 12 horas antes de las 12.30 del día 25/11/2020”.

Según ellos, “presentaba signos inequívocos” de agonía prolongada, por no haber sido debidamente controlado “desde las 00.30” del día que falleció. infografia Los peritos apuntan esa y otras responsabilidades a los encargados de cuidar su salud, encabezados por el doctor Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov: “el equipo médico tratante se representó cabal y acabadamente la posibilidad del resultado fatal respecto del paciente, siendo absolutamente indiferentes a esa cuestión, no modificando sus conductas y plan médico/asistencial trazado, manteniendo las omisiones perjudiciales precedentemente apuntadas, abandonando ‘a la suerte’ el estado de salud del paciente”. Por eso en el punto 2 de las conclusiones son lapidarios: “el actuar del equipo de salud a cargo que atendía a Diego Armando Maradona fue inadecuado, deficiente y temerario”. Lo peor, señalan, es que dan por “verosímil que Maradona hubiera tenido chances de vida aumentada de haber sido internado en una institución de salud polivalente.

 A las claras está que ese no fue el caso… Fue una decisión deliberada y conociendo los riesgos (‘el gordo se muere en cualquier momento’ -en realidad la frase, dicha por Luque, fue “se va a cagar muriendo”-) que tomó el equipo de salud. En este punto es donde surge un conflicto de intereses, quien dirigía al equipo de salud tratante es quien gozaba plenamente de la confianza del paciente”. En este sentido, explican lo inexplicable: “A pesar de haber tenido una prescripción adecuada en dosis y posología para su trastorno toxicofrénico, no podemos descartar que esta medicación no haya influido en el desenlace fatal”. 

 Diego en su última época como DT de Gimnasia y Esgrima de La Plata. EFE/Demian Alday Diego en su última época como DT de Gimnasia y Esgrima de La Plata. EFE/Demian Alday Por supuesto, a nadie escapa que la clave de la mala salud de Diego pasaba por su corazón, algo golpeado, entre otras cosas, por una hipertensión arterial, una aterosclerosis leve en la carótida (según un Eco Doppler de vasos de cuello que le practicaron en la Clínica IPENSA de La Plata el 9-9-2020), el tabaquismo, la obesidad, el sedentarismo y su enfermedad renal crónica. Esto suponía un “riesgo cardiovascular intermedio/alto”. El trabajo de los peritos sostiene que “falleció de una insuficiencia cardíaca congestiva luego de un período agónico prolongado”, como se detalló. Su corazón pesaba 503 gramos, un 40 o 50% más que uno normal. Esto se traduce en una cardiopatía hipertrófica ventricular izquierda, agrandamiento de aurícula izquierda y disfunción diastólica asociadas a los sedimentos acumulados por años de consumo de cocaína y alcohol. “Resulta un corazón insuficiente para solventar las necesidades del organismo”, resumen. Pero eso es, apenas, la punta del iceberg. Además, señalan los peritos que sufría “enfermedad de miocardio”, “patología del ritmo cardíaco” y una “coronariopatía”. Estos problemas del corazón ocasionaban el deterioro de otros órganos, como por ejemplo los riñones. Maradona tenía diuresis positiva y nicturnia (aumento de micciones durante la noche), un síntoma de patología cardíaca. 

También padecía insuficiencia renal e infecciones urinarias, con “valores de uremia y creatininemia elevados en numerosas oportunidades”. Y sumaba “glomeruloesclerosis, fibrosis, necrosis tubular aguda y congestión venosa”. Por supuesto, destacan la incidencia negativa que tuvo el “uso de sustancias tóxicas” como las drogas (que en varios párrafos coinciden que las dejó en el año 2000), el alcohol y los antiinflamatorios. Su riñón derecho pesaba 213 gramos y el izquierdo, 183. Diego y el doctor Leopoldo Luque, en una de las últimas imágenes del astro con vida, tras ser operado de un hematoma subdural Diego y el doctor Leopoldo Luque, en una de las últimas imágenes del astro con vida, tras ser operado de un hematoma subdural Por su parte, en la sangre se detectó anemia crónica, asociada al déficit de fólico B12 e hierro y también dislipemia (hipertrigliceridemia, concentración elevada de grasas). 

El último análisis de colesterol, hecho el 3/9/20, dio 156 mg/dL, cuando el límite superior del rango normal se establece entre 130 y 159. Y en cuanto a sus pulmones, tuvo una internación por neumonía en el Instituto FLENI en 1999 y mostraban los efectos del tabaco. El informe dedica especial atención a los padecimientos de la cabeza y el cerebro de Diego. La Junta Médica explica que el hematoma subdural crónico no ameritaba una neurocirugía de urgencia según las interconsultas con la clínica IPENSA de La Plata, donde lo descubrieron. Los peritos indican que Maradona “se hallaba evolucionando un cuadro compatible con una abstinencia alcohólica”. Y abren un paréntesis para advertir que “los alcohólicos son más propensos a formarlos (se refiere a los hematomas subdurales) que la población en general” y que la “atrofia cerebral parece ser un factor predisponente” para los mismos. También en el cerebro de Maradona se indican áreas de hipoperfusión (provocada por la reducción brusca del gasto cardíaco) a nivel frontal bilateral, en lóbulos temporales con predominio izquierdo y en parietales y occipital derecho. Con este panorama, dicen “debería haberse dispuesto un seguimiento con controles y estudios cardiológicos, más aún con la medicación que se había indicado por sus abstinencia y dependencia alcohólica, que poseen efectos cardiotóxicos”. 

Otra vez, el equipo médico queda a la intemperie en estas contundentes páginas. Esos medicamentos y sus dosis, indica el informe, eran los siguientes: Quetiapina, 150 mg/día. Es un fármaco antipsicótico de baja potencia para “esquizofrenia, episodios maníacos y depresivos severos del trastorno bipolar”. Entre los muchos efectos adversos que se enumeran en el informe de la Junta Médica, está el aumento de peso, la hiperglucemia, alteraciones en el lenguaje y el pensamiento. Naltrexona, 50 mg/día. Antagonista de los receptores opiáceos. Se indica para tratar la dependencia a sustancias alcohólicas. Sus efectos adversos son numerosos, tanto digestivos como neurológicos, lesiones en la piel y toxicidad hepática. En el informe se advierte que “no debe ser usado en forma concomitante con drogras ilícitas, opiáceos ni alcohol”. 

Como se reitera en la causa, esto no sucedía en la última morada de Maradona. Gabapentina, 900 mg/día. Antimaníaco y estabilizador del ánimo “con gran potencial ansiolítico” pero sin contraindicaciones. Venlafaxina, 75 mg /día. Antidepresivo. Como efecto adverso señala, por ejemplo, la arritmia. Los remedios que le suministraban a Maradona y que, según la Junta Médica, podrían haber incidido en su falla cardíaca final Los remedios que le suministraban a Maradona y que, según la Junta Médica, podrían haber incidido en su falla cardíaca final Lurasidona, 40 mg/día. Psicofármaco antipsicótico, indicado en esquizofrenias y otras psicosis. Según la Junta Médica, se debe tener “especial cuidado con pacientes cardiópatas ya que prolongan el QT”, es decir, que el corazón lata rápido y de manera caótica. También puede producir edemas, parkinsonismo, aumento de peso y hasta ideas de suicidio. Levetiracetam, 1000 mg/día. Anticonvulsivo. Se recomienda “precaución en pacientes con insuficiencia hepática, renal y depresión”, entre otras afeccciones. Omeprazol, 20 mg/día, para la acidez. Complejo de Vitamina B Ketorolac (encontrado en estudios postmortem) Antiinflamatorio no esteroide. Como efectos adversos puede producir necrosis tubular aguda e hipertensión arterial. 

 Quizás la frase más triste de todo el informe es que Diego “no se encontraba en pleno uso de sus facultades mentales, ni en condiciones de tomar decisiones sobre su salud” en los últimos tiempos. En forma tajante, colocan la responsabilidad nuevamente en el equipo conducido por Luque y Cosachov. Pero también, de soslayo, observan a la familia. Allí se lee que Maradona “era un consumidor problemático de sustancias, dependiente, con múltiples episodios auto y heteroagresivos, polimedicado psicofarmacológicamente al momento de la externación de la Clínica Olivos donde el equipo médico y la familia decidieron una ‘internación domiciliaria en el Barrio San Andrés de Tigre el día 11/11/202”. Y añade algo decisivo: “de hecho, en el documento firmado al momento de la externación de la Clínica Olivos no está plasmada la rúbrica del paciente. Esto se contradice con las excusas de los profesionales tratantes al manifestar que ‘Diego no se dejaba revisar’, es decir que decidían en forma negativa sobre su salud en algunas circunstancias que involucraban mantenerlo bajo estricta vigilancia con cuidados apropiados, estudios complementarios disponibles a toda hora; y por otro lado, dejaban que decida el paciente cuando este no quería recibir médicos para el seguimiento de su salud en una internación domiciliaria paupérrima”. 

 En ese punto, añaden, “surge del expediente que en diciembre del 2019 que DAM presenta ascitis (exceso de líquido en el abdomen) desde ese momento (que fue llevado al country San Andrés de Tigre), el médico interviniente que realiza el diagnóstico no volvió a ser convocado deliberadamente”. A los peritos los alarma que “ante las múltiples transgresiones del paciente durante la internación domiciliaria (alimentación contraindicada, hidratación con alta carga de sodio) y la deficiencia en los controles médicos y de enfermería” no lo hayan internado en una clínica. También desconfían de las anotaciones que supuestamente tomaban quienes debían asistir a Diego: “Llama poderosamente la atención la variación en los registros de los parámetros vitales registrados; durante los controles nocturnos se consignaron reiteradamente registros de hipertensión diastólica y taquicardias y durante el resto de los controles no existen estas alteraciones, lo que hace suponer que esos controles no fueron efectuados por las enfermeras de los turnos diurnos”. 

 En la imagen, Leopoldo Luque, doctor de Diego Maradona. EFE/Enrique García Medina/Archivo En la imagen, Leopoldo Luque, doctor de Diego Maradona. EFE/Enrique García Medina/Archivo Sostienen, además, que tenía “deterioro cognitivo crónico” y “trastornos de conducta y de lenguaje”. Y enumeran, asimismo, una posible presencia de la Enfermedad de Parkinson y probables síndromes bipolar y depresivo. Luego del corazón y el cerebro, en el otro órgano que Maradona presentaba un importante deterioro era el hígado. De acuerdo a un informe de laboratorio fechado el 11/06/2019, Maradona “presentaba serología compatible” con una hepatitis B ya curada, y que había contraído en 1983. El consumo descontrolado de bebidas, aseguran, le ocasionó una hepatitis alcohólica que provocó dos internaciones: una en el sanatorio Güemes por síndrome de abstinencia y otra en el Sanatorio Los Arcos entre el 28/03/2007 al 10/04/2007, cuando ingresó por epigastralgia y alteración del Hepatograma. Según la documentación obtenida por la Junta Médica, allí “se detalla que consumía aproximadamente 5 litros de bebidas alcohólicas al día”. También se detectó hígado graso a través de ecografías abdominales y cirrosis hepática. Hubo una tercera ese año, en la Clínica Avril, para tratar ese abuso del alcohol. 

 En cuanto al resto del aparato digestivo, se detectaron hemorragias y úlceras en la unión gastroyeyunal, un páncreas afectado por glucemia alterada en ayunas que lo hacía insulino resistente, el padecimiento de síndrome metabólico, hemorroides, epigastralgia (dolor abdominal por el reflujo) y obesidad. Les llamó la atención a los peritos que “tampoco se controló correctamente la diuresis (saber cuánto orinaba) y el peso, como son los controles básico de enfermería”. Sobre este punto se indica que, con 1,60 de altura, llegó a pesar 95 kilos. Agustina Cosachov, psiquiatra de Maradona. Agustina Cosachov, psiquiatra de Maradona.

 Por último, el informe subraya otros problemas de salud, como “temblor palpebral (de los párpados)”, “hinchazón” de la cara”, “pituitas matinales” (moco), “ronquidos inhabituales” y una mononucleosis de vieja data. Asimismo, describe las cirugías al as que se sometió: de osteosíntesis de tobillo izquierdo (tan castigado en el Mundial ’90, cuando parecía una pelota de fútbol y Diego jugaba igual), el by pass gástrico de 2006, la cirugía de rodilla derecha (con reemplazo total) y una hernioplastia umbilical. Todo esto soportaba el cuerpo de Diego Armando Maradona cuando lo cubrió la oscuridad definitiva. Pero no con el piadoso fin que llega como un chasquido de dedos y evita el sufrimiento. Siempre habrá que recordarlo: el argentino más famoso de la historia agonizó 12 horas. Y murió -lo dejaron morir- en la soledad más absoluta.

No al feminismo radical

SOCIEDAD FORD | NORDEX | LLAMADO Ford y Nordex abren un llamado para 120 empleos en la industria automotriz

Las firmas, que anunciaron una inversión de 50 millones de dólares, ensamblarán en lo que será su nueva planta de producción en Uruguay la Ford Transit.
 

Nordex y Ford invertirán 50 millones de dólares en la industria automotriz local, anunciaba el año pasado el ministro de Industria, Omar Paganini. Ahora, las dos empresas anunciaron el primer llamado para cubrir 120 vacantes, consigna este viernes el diario El Observador

 El llamado es para cargos que incluyen operario para montaje automotriz, logística, soldadura, control de calidad, limpieza, elevadoristas, operarios para el proceso de pintura automotriz y técnicos electromecánicos. La inversión prevé generar 200 empleos directos y otros adicionales que serán indirectos.

 La planta uruguaya de la automotriz estadounidense fabricará camionetas Ford Transit. Anuncios La socia de Ford será la empresa uruguaya de ensamblaje Nordex que hasta ahora trabaja con Citroen y Peugeot, afirma la publicación. Se espera que para el segundo semestre la firma pueda abastecer el mercado interno con estas camionetas que hasta ahora son importadas.

¿Tesoro mesoamericano o falsificación? Los enigmas del penacho de Cuauhtémoc

 Expertos franceses y mexicanos investigan la pieza, que está en París, para determinar su origen y función, aunque ya tienen algunas pistas: no es un tocado y nada apunta a que haya pertenecido al último emperador mexicano


Un marchante francés de dudosa reputación guardaba en su colección una pieza circular excepcional, hecha de plumas y más de 200 pequeños bastones. Eugène Boban, que en el siglo XIX se promocionaba como el anticuario de Maximiliano de Habsburgo, decía que se trataba de un tocado mesoamericano que perteneció al emperador mexica Cuauhtémoc. La pieza se vendió, pasó de mano en mano y el nombre se perpetuó. 

El llamado penacho de Cuauhtémoc se encuentra hoy en el Museo del Quai Branly, en París, pero expertos franceses y mexicanos lo estudian para determinar su origen, su antigüedad y su función. Después de tres años, tienen algunas pistas: no es un tocado y es posible que no perteneciera al último tlatoani. El artefacto es una pieza que extendida mide 28 centímetros de diámetro y que pesa 80 gramos. En el centro, tiene un círculo de 8,5 centímetros tejido concéntricamente, recubierto por un textil y reforzado con cuatro varillas. De él cuelgan, 211 pequeños bastones rematados con flores hechas de plumas. “¡No hay manera de usarlo en la cabeza!”, explica María Olvido Moreno, doctora en Historia del Arte y parte del grupo interdisciplinario de expertos en restauración, historiografía, física, química, botánica y ornitología que empezaron a estudiar el artefacto en 2018. La “ingeniería y dinámica muy especiales” del objeto indican que no se trata de un penacho. “No es estático”, señala Moreno.

 Los expertos aún no han determinado qué tipo de artefacto es o si, incluso, es una parte de algún otro objeto. Laura Filloy, doctora en Arqueología, y parte del equipo de expertos que analiza la pieza, se pregunta: “¿Se movía para un lado, para el otro, tenía dos lados, o solamente uno?”. La restauradora del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) propone imaginar la pieza en su contexto de uso, donde “el movimiento y lucimiento de las plumas era parte fundamental”. Aunque las plumas del artefacto que ahora se conserva en los depósitos del Museo del Quai Branly han perdido en parte sus colores –rosas, rojos, amarillos, naranjas, violetas, azules o verdes– y algunas han desaparecido, la especialista supone que “debieron lucir espectaculares”. Detalle de las plumas, en una imagen de 2018. Detalle de las plumas, en una imagen de 2018. CORTESÍA Fabienne de Pierrebourg, responsable de las colecciones de América del museo parisino, explica que el estado de la pieza es "muy frágil". Por eso, y debido a que "siempre" exisitieron dudas sobre su origen, nunca se exhibió en las salas del Museo del Quai Branly. Ningún país, hasta ahora, ha reclamado su restitución. Lo que los expertos saben es que el artefacto llegó a París de manos de Bobán, un marchante que vivió en México en el siglo XIX y comerciaba con todo tipo de “curiosidades americanas” que no correspondían con los parámetros de originalidad y antigüedad que él proclamaba. Así lo relatan Moreno, Filloy, De Pierrebourg y Leonardo López Lujan, director del Proyecto Templo Mayor, en un artículo de Arqueología Mexicana publicado el abril. El francés aseguraba que el objeto había sido obsequiado a Maximiliano de Habsburgo por su hermano, el emperador de Austria. Cuando en 1868 cayó el imperio de Maximiliano en México, afirmaba Bobán, él tuvo la fortuna de comprar la pieza.

 Los autores del artículo escriben que lo increíble del relato es que la pieza no figura en los inventarios de las colecciones mesoamericanas de Ambras y Viena. La sospecha es que Bobán inventó esa historia y bautizó el objeto con el nombre del último tlatoani para venderlo más caro. Y así quedó registrado en el Museo de Etnografía de Trocadero, en París, desde 1878. “Quiso darle un halo de autenticidad, de pertenencia a un gran gobernante”, señala Moreno. Las doctoras Filloy y Moreno en el atelier de restauración del Museo del Quai Branly, en 2018. Las doctoras Filloy y Moreno en el atelier de restauración del Museo del Quai Branly, en 2018. CORTESÍA En ese sentido, aclara Moreno, es posible hablar de una falsificación: “A él no le constaba que fuera un penacho y mucho menos que hubiera pertenecido a algún tlatoani”. Sin embargo, sí es posible afirmar que la pieza es un auténtico objeto de plumaria antigua de América que podría tener 500 años. 

Las plumas, según observó uno de los expertos del equipo, parecen proceder de especies de aves endémicas del continente, como loros, patos o guacamayas. El objeto podría ser un tesoro mesoamericano, pero también uno amazónico o andino. “En esos términos es una pieza excepcional”, zanja Filloy. Las piezas de arte plumario andinas o amazónicas son abundantes, explica la arqueóloga. Pero las mesoamericanas son pocas: solo se conservan cinco discos y el conocido como penacho de Moctezuma, un tocado que salió del territorio mexica hace 500 años y que se conserva en Viena, como otros miles de antiguas piezas dispersas en el extranjero que salieron del continente a través del expolio arqueológico o en las manos de algún coleccionista privado. “Quizás podríamos estar, como en el caso del penacho de Moctezuma, ante una pieza sobreviviente única. Pero eso todavía lo tenemos que confirmar”. Las claves para descifrar el origen del artefacto Actualmente, diferentes muestras de cordeles, textiles, papeles y otras fibras se encuentran en laboratorios de Europa y México para su caracterización, aunque los resultados se han retrasado debido a la pandemia. 

Cuando las expertas terminen de definir el catálogo de técnicas plumarias y hayan identificado las materias primas, podrán comparar la información con los catálogos de técnicas plumarias que ya existen en Perú, el Amazonas y México. “Y entonces podremos decir que técnicamente es semejante, muy similar o diferente del corpus de objetos plumarios conocidos”, aclara Moreno. Registro con microscopio, en París, en 2018. Registro con microscopio, en París, en 2018. CORTESÍA Las flores confeccionadas con plumas son otra clave para conocer más sobre su origen. Saber qué especies de flores están representadas con las plumas y su significado podría darles más pistas. “Quizás sean representaciones de flores que no existían en Mesoamérica y eso nos lleve a Sudamérica”, indica Moreno. 

Otra clave está en descubrir qué pegamentos se usaron para adherir las plumas. Pero no es sencillo, aclaran las especialistas, porque la pieza, por ejemplo, pudo haber estado expuesta a una fumigación y entonces podría tener residuos de sustancias tóxicas que no permiten identificar materiales orgánicos. “Aún nos podemos encontrar con ciertos obstáculos”, explica la restauradora. Los enigmas que rodean a esta pieza persisten. “Si llega a ser mesoamericana sería algo extraordinario, porque enriquecería el conocimiento de las culturas antiguas de nuestro país”, apunta Moreno. ¿Sería decepcionante que no lo fuera? “No, estas piezas nunca decepcionan”, defiende la historiadora del arte, y completa: “No importa si es andina, amazónica o mesoamericana. Tal es su complejidad, su belleza y sus características dinámicas que todos los resultados de la investigación van a ser un aporte al conocimiento universal”

Crematorios improvisados en la India

India amplía su campaña de vacunación contra la COVID-19, pese a la escasez de vacunas, mientras siguen aumentando los casos de manera vertiginosa. El sábado se detectaron más de 400 000 nuevos positivos. Los crematorios improvisados proliferan por todo el país

Corea del Norte recibió al año nuevo 2021 con un imponente show de fuego...

final del congreso de la asociacion juvenil de Corea del Norte, en su décimo aniversario. Miles de jóvenes participaron en un desfile de antorchas en Pyongyang, la capital norcoreana. El extravagante evento culminó con una espectacular exhibición de fuegos artificiales y se cree que tuvo lugar entre el jueves y el viernes. El congreso está abierto a jóvenes de entre 14 y 30 años, que participan en actividades que van desde sesiones de estudio hasta ayudar en grandes proyectos de construcción

Vuelven los cruceros al Mediterráneo


Por primera vez en cuatro meses, una embarcación de Costa Cruceros zarpó del puerto italiano de Savona. Los viajes de recreo marítimos estaban prohibidos por el gobierno italiano desde navidad debido a la pandemia

Falta de vacunas, economías frágiles y el factor Brasil: por qué América Latina representa el 35% de todas las muertes por coronavirus del mundo

La peligrosa variante de Manaos acecha a la región, que ya ha soportado algunos de los confinamientos más estrictos, los cierres escolares más prolongados y las mayores contracciones económicas del mundo Por Julie Turkewitz Mitra Taj

En la capital de Colombia, la alcaldesa advierte a los habitantes que se preparen para “vivir las dos peores semanas posiblemente de nuestras vidas”. Uruguay, que alguna vez fue celebrado como un país modelo en el control del coronavirus, ahora tiene una de las tasas más altas de defunción del mundo, mientras que los conteos diarios de fallecimientos han alcanzado cifras récord en Argentina, Brasil, Colombia y Perú en los últimos días. Incluso Venezuela, donde el gobierno autoritario sobresale por esconder las estadísticas de salud y acallar cualquier insinuación de descontrol, reporta que las muertes por coronavirus han aumentado 86 por ciento desde enero. Al avanzar la vacunación en algunos de los países más ricos del mundo y la gente empieza cautelosamente a vislumbrar la vida tras la pandemia, la crisis en América Latina —en particular en Sudamérica— ha empeorado de manera alarmante y podría poner en riesgo el progreso logrado más allá de sus fronteras.

 La semana pasada, América Latina representaba el 35 por ciento de todas las muertes por coronavirus en el mundo, a pesar de tener solo el 8 por ciento de la población global, según datos recabados por The New York Times. Latinoamérica ya era una de las regiones más afectadas en 2020 y había visto cadáveres abandonados en las aceras y bosques que cedían el paso a nuevos cementerios. Sin embargo, tras un año de pérdidas incalculables, sigue siendo una de las zonas más preocupantes a nivel global, con un alza reciente en muchos países que ha resultado ser aún más mortífera que antes. En parte, la crisis es producto de dinámicas predecibles: suministros limitados de vacunas y campañas lentas de inmunización con sistemas de salud débiles y economías frágiles que dificultan mucho imponer o mantener órdenes de confinamiento y suspensión de actividades. Pero la región tiene otros desafíos espinosos, dicen los funcionarios de salud: vivir codo a codo con Brasil, un país de más de 200 millones de habitantes cuyo presidente consistentemente ha desestimado la amenaza del virus y criticado las medidas para contenerlo, ayudando así a azuzar una peligrosa variante que acecha al continente. La duración de la epidemia en Latinoamérica también hace que sea muy difícil combatirla. La región ya ha soportado algunos de los confinamientos más estrictos, los cierres escolares más prolongados y las mayores contracciones económicas del mundo. 

 La desigualdad, una tara de larga data que antes de la pandemia se estaba reduciendo, ha vuelto a acentuarse y millones de personas han vuelto a ser arrojadas a la vida precaria que pensaban que habían dejado atrás durante un relativo auge regional. Muchos han salido a la calle a desfogar su inconformidad, desafiando los pedidos oficiales de quedarse en casa. “Nos quitaron tanto que perdimos hasta el miedo” leía una pancarta que llevaba Brissa Rodríguez, de 14 años, en una protesta en Bogotá con miles de manifestantes el miércoles. Existe preocupación entre los expertos de que América Latina esté camino a convertirse en uno de los pacientes con covid prolongado del mundo, dejando cicatrices económicas, políticas, sociales y de salud pública más profundas que en cualquier otro lugar del mundo. “Esa es como la historia que está comenzando a contarse”, dijo en una entrevista Alejandro Gaviria, economista y exministro de Salud de Colombia que dirige la Universidad de los Andes. “He tratado de mantenerme optimista”, escribió también en un ensayo reciente. “Quiero pensar que lo peor ya pasó. Pero resulta, creo, contraevidente”. Si América Latina no logra contener el virus —o si el mundo no interviene para ayudarla— pueden surgir nuevas variantes más peligrosas, dijo Jarbas Barbosa, de la Organización Panamericana de la Salud. “Eso puede costar todo el esfuerzo que el mundo está haciendo” para combatir la pandemia, dijo. Instó a los líderes a trabajar lo más rápido posible para proporcionar un acceso igualitario a las vacunas para todos los países. Activistas de la ONG Río de Paz llevan una bandera brasileña mientras muestran cientos de bolsas de plástico, que representan cadáveres, durante una protesta contra las políticas de Jair Bolsonaro, en medio del brote de la enfermedad del coronavirus (COVID-19), en la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, Brasil, Activistas de la ONG Río de Paz llevan una bandera brasileña mientras muestran cientos de bolsas de plástico, que representan cadáveres, durante una protesta contra las políticas de Jair Bolsonaro, en medio del brote de la enfermedad del coronavirus (COVID-19), en la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, Brasil, “El peor escenario es el desarrollo de una nueva variante contra la que las vacunas actuales no protejan”, dijo. “No es solamente una necesidad ética y moral, sino también una necesidad sanitaria tener el control en todas partes del mundo”. 

 La propagación del virus en la región puede atribuirse, al menos en parte, a una variante denominada P.1, identificada por primera vez en la ciudad brasileña de Manaos a finales del año pasado. Manaos, la mayor ciudad de la Amazonia brasileña, fue devastada por el virus a mediados de 2020. Pero la segunda ola allí fue peor que la primera. Aunque los datos están lejos de ser concluyentes, los primeros estudios indican que la P.1 es más transmisible que el virus inicial, y es más probable que mate a pacientes sin condiciones preexistentes. También puede reinfectar a personas que ya han tenido covid, aunque no está claro con qué frecuencia ocurre.La P.1 está presente ahora en al menos 37 países, pero parece haberse extendido más a través de América del Sur, según William Hanage, epidemiólogo de la Universidad de Harvard. En toda la región, los médicos dicen que los pacientes que llegan a los hospitales son ahora mucho más jóvenes y están mucho más enfermos que antes.

 También es más probable que ya hayan tenido el virus. En Perú, el Instituto Nacional de Salud documentó 782 casos de probable reinfección solo en los tres primeros meses de 2021, un aumento con respecto al año pasado. Lely Solari, médica infectóloga del instituto, calificó esto como “un subregistro muy importante”. En los últimos días, las cifras oficiales de muertes diarias han superado los récords anteriores en la mayoría de los países más grandes de América del Sur. Sin embargo, los científicos afirman que lo peor aún está por llegar. El director de epidemiología del Ministerio de Salud de Colombia, Julián Fernández, dijo que era probable que las variantes, incluida la P.1 y otra variante encontrada por primera vez en Gran Bretaña el año pasado, lleguen a ser las cepas dominantes del virus en Colombia dentro de dos o tres meses.

 La región no está preparada. Colombia ha sido capaz de aplicar una primera vacuna a solo el seis por ciento de su población, según Our World in Data, un proyecto de la Universidad de Oxford. Varios de sus vecinos han logrado la mitad, o menos. En cambio, Estados Unidos, que compró vacunas antes que otros países, está en el 43 por ciento. Perú, el quinto país más poblado de América Latina, ha surgido como un microcosmos de las crecientes dificultades de la región. Como muchos de sus vecinos, Perú ha logrado un importante progreso económico en las dos últimas décadas, al usar las exportaciones de materias primas para aumentar los ingresos, reducir la desigualdad y aumentar las aspiraciones de la clase media. Pero el auge trajo consigo pocos puestos de trabajo estables, dio lugar a escasas inversiones en salud y no logró contener el otro flagelo de la región: la corrupción. El virus llegó a Perú en marzo del año pasado, al igual que a gran parte de América Latina, y el gobierno actuó rápidamente para confinar al país. Pero con millones de personas trabajando en el sector informal, hacer cumplir las cuarentenas se hizo insostenible.

Los casos aumentaron rápidamente y los hospitales pronto entraron en crisis. Para octubre, el país se convirtió en el primero del mundo en registrar más de 100 muertes por cada 100.000 habitantes. La cifra de muertos es mucho mayor, porque muchos de los fallecidos no han sido incluidos en el recuento oficial de pacientes con coronavirus. Vista cenital de las cruces que proyectan sombras en el cementerio de Parque Taruma, durante el brote de la enfermedad coronavirus (COVID-19), en Manaos, Brasil. 15 de junio de 2020. Foto tomada con un drone. REUTERS/Bruno Kelly/ Vista cenital de las cruces que proyectan sombras en el cementerio de Parque Taruma, durante el brote de la enfermedad coronavirus (COVID-19), en Manaos, Brasil. 15 de junio de 2020. Foto tomada con un drone. REUTERS/Bruno Kelly/ Luego, misericordiosamente, los nuevos casos comenzaron a disminuir. Un estudio del gobierno en la capital, Lima, descubrió que el 40 por ciento de los residentes tenían anticuerpos contra el coronavirus. Las autoridades dijeron que la población había alcanzado un nivel de inmunidad tan alto que una segunda ola podría no ser tan mala. El gobierno optó por no imponer un confinamiento durante las celebraciones de Navidad y Año Nuevo. Pero en enero, justo cuando Estados Unidos y otros países iniciaron una fuerte, aunque a veces caótica, distribución de vacunas, en Perú comenzó una segunda ola, y esta ola ha sido aún más brutal que la primera. El mes pasado fue, de lejos, el más mortífero de la pandemia, según los datos oficiales, y los expertos en la salud culpan del aumento a las reuniones navideñas, a los frágiles sistemas de salud y a las nuevas variantes. 

 Las vacunas llegaron a Perú en febrero, seguidas rápidamente por la indignación después de que algunas personas con conexiones políticas se saltaran la fila para vacunarse primero. Más recientemente, varios organismos gubernamentales empezaron a investigar si algunos trabajadores de la salud pidieron sobornos a cambio de acceder a las escasas camas de hospital. “Era eso o dejarla morir”, aseguró Dessiré Nalvarte, de 29 años, una abogada que dijo que ayudó a pagar unos 265 dólares a un hombre que decía ser el jefe de la unidad de cuidados intensivos de un hospital para conseguirle tratamiento a una amiga de la familia que se había enfermado. La crisis ha sumido en el duelo a países como Perú, desgarrando el tejido social. Este mes, miles de peruanos pobres y nuevos pobres empezaron a ocupar terrenos deshabitados en el sur de Lima, y muchos dijeron que lo hacían porque en medio de la pandemia se habían quedado sin forma de ganarse la vida. Rafael Córdova, de 50 años y padre de tres hijos, estaba sentado en un cuadrado dibujado en la arena que marcaba su reclamo del terreno con vistas a la carretera Panamericana y la costa del Pacífico. Antes de la pandemia, explicó, era supervisor en el departamento de recursos humanos de un municipio local, y había conseguido —o eso creía— la estabilidad. Luego, en mayo, enfermó de covid y fue despedido. Cree que sus jefes lo hicieron porque temían que enfermara a otros, o que su familia les echara la culpa si se moría. Ahora tiene dificultades para pagar los minutos del único teléfono que la familia tiene para que sus hijos puedan hacer los deberes de la escuela. Las comidas son escasas. 

Las deudas se acumulan. “Hoy he ido al mercado y he comprado una bolsa de huesos de pescado y he hecho sopa”, dijo. Dijo que ha perdido a una tía, a una cuñada y a una prima por la covid, además de amigos. En junio, su mujer, quien también había tenido covid, prematuramente dio a luz gemelas. Una de las hijas murió días después de nacer, dijo, y la segunda murió un mes después. No tuvo dinero para un entierro adecuado. “Me fui del hospital con mi hija en una bolsa negra, de plástico. Me metí en un taxi y fui al cementerio”, dijo. “No hubo misa, ni velatorio ni flores ni nada”. Cuando se enteró de la invasión, dijo que llevaba tres meses de retraso en el pago del alquiler y temía ser desalojado. Así que salió con prisa rumbo al arenal, y montó una tienda de campaña que se convirtió en su nuevo hogar. “De acá nadie nos mueve ya”, dijo, “la única forma es si de muertos nos sacan de acá”. Una semana después, la policía llegó, lanzó gases lacrimógenos y lo expulsó a él y a otros miles de personas de su campamento.

Con un promedio diario de 20.625 infectados por COVID en la última semana, Argentina superó los 3 millones de contagios

 

El pico fue el 24 de abril con 24.018 nuevos casos promedio en 24 horas. En el peor momento el año pasado fueron 15.051. Sin embargo, hubo un descenso del 8% en la última semana a nivel nacional. La misma tendencia a la baja se observa en PBA con el 13% y en CABA con el 7% 

 Por Mariel Fitz Patrick y Sandra Crucianelli Infobae


Del total de 3.005.259 de COVID-19 positivos confirmados en los 11 meses que lleva la pandemia en el país, se recuperó el 88% de los afectados por la enfermedad, un total de 2.676.197. Otras 264.810 personas cursan al día de hoy activamente la enfermedad, 5.371 de ellos en terapia intensiva, según el último parte del Ministerio de Salud de la Nación.

 La llegada de la segunda ola Flourish logoA Flourish chart Tras el pico nuevos casos positivos confirmados por día que se dio en octubre del año pasado, con un promedio de casos diarios de 15.051, el número comenzó a descender, y llegó a su piso la primera semana de diciembre cuando se registraron un promedio de 3.300 casos en 24 horas. La llegada del verano generó la sensación de que la pandemia estaba en su recta final. Pero no fue así. A partir de diciembre, en coincidencia con el movimiento de gente que comenzó el fin de semana largo del 8 de ese mes, los contagios reportados día a día comenzaron a aumentar nuevamente, con un nuevo pico el 7 de enero, que fue considerado un rebrote. Ese día se reportaron 13.835 nuevos casos en 24 horas.

 Desde entonces, lentamente comenzó a observarse una baja. Pero todo cambió a mediados del mes pasado, con la llegada del otoño y las nuevas cepas más contagiosas, después de la relajación social en la prevención que se dio en el verano. El 13 de marzo, el promedio de nuevos casos diarios era de 6.473. A partir de ese momento se produjo un aumento acelerado en el ritmo de contagios, que escaló aún más a partir del 12 de abril cuando el promedio de nuevos casos diarios fue de 20.691. El pico se alcanzó el 24 de abril pasado con un promedio diario de casos de 24.018. Es un aumento del 271% casi 3 veces más, en solo 40 días. 

 En esta escalada tuvieron mucho que ver la virulencia de las nuevas cepas de Manaos (Brasil) y del Reino Unido, con un mayor nivel de contagiosidad, y el hartazgo de muchos sectores de la sociedad que bajó la guardia con la prevención, especialmente entre los jóvenes y adultos jóvenes. La franja entre 20 y 40 años hoy concentra el 44% de los nuevos contagios. Del total de contagios a nivel nacional, el 44% (1.312.518) tienen residencia en la provincia de Buenos Aires, y el 12% (346.223) en la Ciudad de Buenos Aires. El resto son del interior del país. Luego de los dos distritos más populosos, los que acumulan mayor cantidad de infectados son Santa Fe con 276.639; Córdoba con 229.518; y Tucumán con 106.839. 

El resto de las provincias registran menos de 100.000 casos desde el inicio de la pandemia. Formosa es la que menos casos tuvo hasta ahora de contagios por una férrea política sanitaria, cuestionada por violar los derechos humanos: 4.539. El aumento de los casos en esta segunda ola tiene su contracara en el lento avance del operativo de vacunación. En medio de la demanda de vacunas a nivel global, al país llegaron hasta ahora 11.698.145 dosis de las más de 60 millones comprometidas. Sólo el 15% de la población tiene al menos la primera aplicación y el 2% de la población tiene ambas. El viernes pasado llegaron las últimas 765.545 dosis del componente 1 de la vacuna Sputnik V, mientras que el Gobierno busca retomar las frustradas negociaciones con Pfizer para lograr que finalmente se importen vacunas de ese laboratorio.

 En paralelo, el oficialismo busca destrabar el envío de 900.000 dosis de AstraZeneca desde México, que forman parte del contrato que firmó la Argentina con ese laboratorio y que aún no tienen fecha de arribo. Muchos casos pero pocos testeos Los 3 millones de contagios acumulados en el país impactan por su dimensión, pero no reflejan con exactitud la cantidad de personas que efectivamente tuvieron el virus. El número oficial de casos está estrechamente relacionado con la cantidad de test que se realizan para detectar la enfermedad en la población. Argentina es uno de los países del mundo con menos test por millón de habitantes efectuados desde el inicio de la pandemia. Se ubica en la posición 65 en una lista de 147 países, según el sitio de estadísticas norteamericano Worldometers. Flourish logoA Flourish hierarchy chart Al posicionarse sobre cada país, se visualiza la cantidad de test por millón de habitantes. Con 11.245.454 de test totales, tiene apenas 247.798 análisis realizados por millón de habitantes lo cual representa el 24 % de la población testeada. Dinamarca, Israel y el Reino Unido, por ejemplo, realizaron más test que el total de su población.

 Con un nivel de testeo bajo, la tasa de positividad, que idealmente debería ubicarse entre el 5% y el 10%, en Argentina es del 27% (diaria) y 33% (acumulada). Con un testeo mayor, la cantidad de positivos sobre testados bajaría y se podría aislar rápidamente a los detectados con el virus para evitar más contagios. Del total de 3.000.000 de COVID-19 positivos confirmados en los 11 meses que lleva la pandemia en el país, se recuperó el 88% de los afectados por la enfermedad, un total de 2.676.197. Otras 264.810 personas cursan al día de hoy activamente la enfermedad, 5.371 de ellos en terapia intensiva, según el último parte del Ministerio de Salud de la Nación. Argentina en relación al mundo Los más de 3 millones de contagios ubican a Argentina dentro de los países con más casos detectados acumulados, en el lugar 11º de una lista de 147 naciones.

 No es una posición muy ventajosa, considerando que el 31 de agosto del año pasado nos ubicamos en el top ten mundial con más casos de infectados. Flourish logoA Flourish hierarchy chart Argentina está en el puesto 11º en casos acumulados a nivel mundial, sobre una lista de 147 países. Sin embargo, los números absolutos no son comparables entre países con distinto tamaño poblacional. En ese sentido, es recomendable analizar la incidencia, que refleja la cantidad de contagios por cada 100.000 habitantes. Este indicador ubica a Argentina en la posición 29 dentro de una lista de 147 países, según la Universidad de Johns Hopkins, de Maryland, Estados Unidos. Con 6.744 casos por cada 100.000 habitantes, la incidencia en nuestro país es bastante menor que la de Estados Unidos (9.895), Israel (9.441) y España (7.508), entre otros.

 Sin embargo, a nivel regional, Argentina muestra uno de los valores más altos de este indicador, solo superado por Brasil, con 7.030 casos por cada 100.000 habitantes. Chile tiene un valor apenas inferior, de 6.427. Otros países de Latinoamérica tienen mejores resultados, como Uruguay con 5.825 contagios cada 100.000 habitantes. Flourish logoA Flourish chart Argentina se ubica en la posición 29 a nivel mundial en incidencia, que mide los casos detectados cada 100.000 habitantes. Cómo se procesó la información La Unidad de Datos de Infobae descarga diariamente los datos oficiales de distintas fuentes, entre ellas, el Ministerio de Salud de la Nación Argentina, la Universidad Johns Hopkins y Worldometers. Estos datos se llevan a una hoja de cálculo, donde se cruzan con datos poblacionales y por continente, detallando las siguientes variables: casos confirmados, muertes, recuperados. Sobre estas bases se calculan varios indicadores entre ellos incidencia, letalidad y mortalidad. Para descargar los datos a nivel mundial y nacional, con sus respectivas pestañas, siga este enlace. Visualizaciones interactivas: Daniela Czibener

El peligro de vivir al borde del acantilado en el Reino Unido

sábado, 1 de mayo de 2021

Isla Sola tv entre los primeros en youtube.wmv

Del enojo por la falta de apoyo al acuerdo para evitar la explosión de la segunda ola: la zigzagueante relación de Alberto Fernández con los gobernadores

 

Para tomar las nuevas medidas el Presidente convocó a los mandatarios, un paso que había evitado antes de la sanción del último decreto. La necesidad del consenso y el cambio de rumbo en las provincias
 Por Joaquín Mugica Díaz



Diecisiete días atrás Alberto Fernández estaba sentado frente a una cámara anunciando un paquete de medidas restrictivas que traía escondido en su interior la suspensión de las clases presenciales en el AMBA. Minutos antes les había confesado a Santiago Cafiero y Carla Vizzotti su voluntad de avanzar sobre las clases sin acordar la medida con Horacio Rodíguez Larreta. En ese instante dio pie a un conflicto. Fernández tomó aquellas medidas en soledad. No solo no habló con el jefe de gobierno porteño, sino que tampoco lo hizo con los gobernadores, sus fieles aliados a lo largo de la pandemia. La mayoría de ellos escuchó en la televisión que el Presidente los invitaba a adherirse a las medidas que había tomado para el AMBA. Se molestaron. Se sintieron ninguneados. 

Ni siquiera los habían llamado por teléfono antes del anuncio. Los gobernadores no se movieron ni un paso. En la Casa Rosada esperaban que replicaran las medidas. No sucedió. Y entonces, por los despachos oficiales, empezaron a hablar de la “irresponsabilidad” de los mandatarios y la falta de “perspectiva” para mirar más allá del momento en que se tomaron las medidas. La relación se tensó. Por lo bajo, en las sombras y sin chicanas públicas. Alberto Fernández junto a uno de los gobernadores más pesados del peronismo, el tucumano Juan Manzur (Presidencia) Alberto Fernández junto a uno de los gobernadores más pesados del peronismo, el tucumano Juan Manzur (Presidencia) El Presidente no tuvo apoyo político en aquella decisión.

 Los gobernadores no acataron su pedido. Rodríguez Larreta decidió ir a la Justicia para discutir la presencialidad en los colegios. Axel Kicillof cumplió a rajatabla el DNU. Incluso, hizo algunos ajustes más restrictivos en la provincia de Buenos Aires. Pero para enfrentar este nuevo esquema de medidas Fernández necesitaba un consenso más amplio. Seguir la misma dinámica iba a volver a derretir su autoridad presidencial. Una vez más. Ese malestar se diluyó entre el martes y miércoles de esta semana, cuando se llevaron adelante dos Zoom en el que participaron Fernández y los gobernadores con el fin de negociar nuevas medidas para afrontar el impacto de la segunda ola. En esta oportunidad, a diferencia de la anterior, los convocó a un encuentro para conocer la realidad de todas las provincias. Ningún gobernador entiende por qué no lo hizo antes. “Esta vez por lo menos convocó y escuchó”, reflexionó un gobernador de la oposición después de estar sentado, durante una hora, esperando a que el Presidente y sus ministros se conecten a la videconferencia. 

Entre los mandatarios ya saben que le horario presidencial no suele suele ser puntual, pero tampoco les cae demasiado bien esperar una hora frente a una pantalla en silencio. El gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, tuvo que aplicar medidas en los principales centros urbanos de la provincia (Presidencia) El gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, tuvo que aplicar medidas en los principales centros urbanos de la provincia (Presidencia) Los gobernadores son parte de la raza más pragmática dentro de la política. No suelen confrontar con la Casa Rosada, se alineen al poder central o, en muchos casos, mantienen una relación cordial con el Gobierno y, tierra adentro, en sus provincias, imponen su mirada de gestión, aunque esta sea diferente a las del Presidente. Ahora que bajó la espuma, volverán a retomar el diálogo habitual. Que hace quince días Fernández no haya llamado a los gobernadores y esta semana sí lo haya hecho fue una decisión exclusiva del Jefe de Estado. Algunos mandatarios quizás lo hubiesen acompañado en el DNU anterior. 

No lo hicieron porque no se los pidió, pero también por dos motivos concretos. Primero para no pagar el costo político en sus provincias con un escenario que aún no estaba al límite. Segundo porque les cayó muy mal haberse enterado por televisión del pedido del Presidente para que se sumen a las medidas. Para este nuevo decreto Alberto Fernández necesitó obtener un mayor respaldo político. Siguió la misma hoja de ruta que le dio resultado en el 2020. Una serie de consultas a especialistas médicos, gobernadores y funcionarios. Un consenso amplio para determinar un paquete de medidas que tengan cierta aceptación en la sociedad y que no obligue a los mandatarios a tomar distancia pública. Era el camino más lógico. Lineal. Sencillo. Sincero.

 La relación entre Alberto Fernández y los gobernadores volvió a encaminarse después del acuerdo para las nuevas medidas La relación entre Alberto Fernández y los gobernadores volvió a encaminarse después del acuerdo para las nuevas medidas La única puerta que quedó abierta es la de la clases presenciales. El Presidente no transó con la idea de Horacio Rodríguez Larreta de acordar la suspensión de la presencialidad en la secundaria y los terciarios, pero mantener el resto con la modalidad presencial. Fernández decidió no dar un paso atrás en esa decisión y extendió la suspensión de clases en el AMBA hasta el 21 de mayo. Ahora espera el fallo de la Corte Suprema que determine si la gestión porteña está obligada o no a cumplir con el DNU y volcar todas las clases al plano virtual. Hay una razón central por la que los gobernadores no se sumaron al decreto del Presidente dos semanas atrás, y no dudaron en hacerlo a partir de este viernes. Tiempo atrás el escenario epidemiológico y sanitario de las provincias no eran tan grave como el actual. 

 No consideraban que hiciese falta suspender las clases presenciales en su totalidad, ni sumar más restricciones nocturnas. Mucho menos cortar las actividades recreativas. No había consenso para avanzar con ese tenor de medidas. Pero con el paso de los días el escenario cambió. Y la mirada estratégica de los gobernadores, también. Pese al acuerdo por la mayoría de las medidas, Fernández y Larreta siguen en disputa por las clases (Foto: Franco Fafasuli) Pese al acuerdo por la mayoría de las medidas, Fernández y Larreta siguen en disputa por las clases (Foto: Franco Fafasuli) “Desde ese día la situación sanitaria se complicó más. 

Pero en ese momento no había consenso. Los gobernadores no tienen tanto margen de acción y no quieren empeorar más sus economías regionales”, explicó a este medio la mano derecha de un gobernador peronista. En los últimos 15 días la mayoría de los gobernadores empezaron a ajustar medidas. Pero lo hicieron con la metodología que el Gobierno ya les había recomendado. Aplicarlas según la realidad epidemiológica de cada municipio. En la actualidad ese es el camino que siguen. Hacen equilibrio, como también lo hace Alberto Fernández. En Balcarce 50 no pueden creer que los mandatarios no hayan podido ver con antelación el comportamiento del virus. Fue igual al del año pasado. Primero se concentra en la Ciudad de Buenos Aires, luego de expande por el conurbano, atraviesa la barrera del AMBA y corre hacia el interior bonaerense. 

Después, empieza la expansión hacia el resto del país. Según entienden en el Gobierno los gobernadores no tuvieron la capacidad de leerlo con antelación. O, tal vez, no lo quisieron hacer. La segunda ola empezó a expandirse por todo el país y para evitar un colapso sanitario tuvieron que respaldar la creación de un nuevo semáforo epidemiológico y apoyar las medidas nacionales al pie de la letra. La relación de la gobernadores con la Casa Rosada se reencausó. Las partes retomaron el diálogo y la línea de los acuerdos. Ese camino le dio buenos resultados a Alberto Fernández durante su gestión. Volver al principio es también volver a una lógica de trabajo más basada en el diálogo y la negociación, que en la decisiones unilaterales y la confrontación.

Premio Nobel: Está en marcha un gran movimiento en apoyo a la iniciativa del Dr. Loinaz de postular al presidente Lacalle Pou para tan distinguido galardón

 Por La Prensa


Premio Nobel: Está en marcha un gran movimiento uruguayo en apoyo a la iniciativa del Dr. Loinaz de postular al presidente Lacalle Pou para tan distinguido galardón. × Recibimos y publicamos El suscrito Dr. José A. Loinaz Barbosa, C.I. 2.646.957-1 y teléfono 4442 2905, se pone a redactar esta segunda carta abierta embargado por una profunda emoción ciudadana y un gran orgullo de haber nacido en la Tierra de Artigas, por el sorprendente y total éxito popular de mi primera carta abierta publicada el mes pasado en este prestigio medio de prensa, y desde entonces he recibido centenares y centenares de llamadas telefónicas y por otros medios de comunicación (YouTube, etc, etc), de total apoyo a mi propuesta del otorgamiento del Premio Nobel de la Paz al Presidente Lacalle Pou, lo cual me ha llevado a poner en marcha un gran Movimiento Uruguayo de respaldo ciudadano a dicha iniciativa, invitando a los Orientales a participar activamente en el mismo, en principio, poniéndose en contacto telefónico conmigo. 

 Dr. José Loinaz Cabe destacar que muy pocas veces en la Historia Política del Uruguay se registra un hecho similar al que me toca vivir, donde una iniciativa de un simple ciudadano, como dice un sabio refrán, “común y corriente”, ha tenido tanta repercusión popular, y todo ello tiene una sola y excluyente explicación: la brillante labor Presidencial del Dr. Lacalle Pou, que está recogiendo una altísima aprobación de la Ciudadanía Uruguaya, nunca antes alcanzada por los anteriores Presidentes, lo cual lo hace merecedor al Premio Nobel de la Paz, también por todo lo que a continuación expresaré en esta misiva abierta. 

 La actuación presidencial del Dr. Lacalle Pou en el inolvidable caso del Crucero australiano con Covid 19, rechazado por varios Países (Chile, Argentina, Gran Bretaña y Reino Unido, entre otras Naciones), en marzo 2020, hasta el 31 de mayo 2020, y el “Corredor Humanitario” que encontró en Montevideo, alcanza por si sola para que el Comité Noruego del Nobel (autoridad que elige el candidato a premiar con dicha distinción), otorgue en diciembre (más precisamente el día 10 de dicho mes), de este año 2021, el preciado Premio Nobel de la Paz, al Dr. Lacalle Pou. 

 El mencionado crucero Australiano llamado “Greg Mortimer” tenía a bordo, nada menos que 217 pasajeros y miembros de la tripulación de distintas Nacionalidades, y de ellos, 128 dieron positivo al Covid 19, y como nadie internacionalmente quiso brindarle ayuda humanitaria, Uruguay con su Presidente a la cabeza, salvó la vida a más de 200 personas, en una acción humanitaria, que se agiganta formidablemente, por ser Única en el Mundo, y que tuvo una extraordinaria difusión noticiera de toda la Prensa, oral radial y televisiva Mundial, elogiando al Uruguay y a su Presidente Dr. Lacalle Pou por dicha inédita acción humanitaria, y que ningún Uruguayo podrá olvidar las escenas muy emotivas, que a muchísimos de ellos provocó lágrimas, de ver “Gracias Uruguay” estampada en la sábana desplegada desde el Crucero Australiano cuando partía el 31 de mayo 2020 del Puerto de Montevideo en agradecimiento al País que les brindó ayuda, y cuando muchos tripulantes y pasajeros del mismo, besaron la Tierra Uruguaya, en una conducta muy conmovedora, nunca antes vista en el Mundo, que colocó al Uruguay en primer lugar como País Humanitario internacionalmente en el enfrentamiento al “Coronavirus”, la peor epidemia en la Historia de la Humanidad.

 Es muy oportuno, señalar que el Premio Nobel de la Paz, fue instituido por el fabricador de armamentos, inventor e industrial sueco Alfred Nobel, junto con los premios de Física, Química, Fisiología o Medicina, Literatura y se otorga anualmente desde 1901, en la persona que haya trabajado más o mejor en favor de la Fraternidad entre las Naciones … “, según el testamento del propio Alfred Nobel. Por voluntad de Nobel, quien lo recibe es seleccionado por el Comité Noruego del Nobel, un Comité de 5 personas determinado por el Parlamento Noruego. 

 Y precisamente, la conducta de nuestro Presidente Lacalle Pou, en el caso del Crucero “Greg Mortimer”, encaja perfectamente dentro de lo exigido por Alfred Nobel, para otorgar dicho Premio, porque nada mejor que trabajar en favor de la Fraternidad de las Naciones, es salvar decenas de vidas de Personas de Varias Naciones del Mundo (recordar que en el Crucero, con más de 200 tripulantes y pasajeros a su bordo provenían de varios Países del Orbe). Y a ello, sumando, reitero, que se trata de un caso único en el Mundo en el combate al Covid 19, el Comité Nobel Noruego, en OSLO (Capital de Noruega), aplicando la Justicia y el Derecho debe otorgar el Nobel de la Paz a nuestro Presidente Dr. Lacalle Pou, el próximo 10 de diciembre. También debe sumarse, a la gran Acción Humanitaria Internacional del Uruguay con su Presidente Lacalle Pou, en el caso del barco británico “ARGOS PEREIRA” encallado en el Puerto de Montevideo, con más de 28 casos positivos de Covid 19, el reciente 13 de febrero 2021, y salvaron sus vidas, gracias al gran trabajo Sanitario de las autoridades del Ministerio de Salud Pública y la Armada del Uruguay, la cual recibió una vez más un gran destaque elogioso Internacional.

 Para que no quede la menor duda de la total Justicia y Derecho, de mi proposición del Premio Nobel de la Paz, para que sea otorgado a nuestro Presidente Lacalle Pou, es absolutamente necesario, volver a leer el contenido de mi Carta Abierta anterior (la primera, publicada en toda la Prensa Nacional, el mes pasado), en la cual destacaba, la singular entereza y la envidiable Valentía y la gran inteligencia, y el admirable y equilibrado ejercicio de la Presidencia, con tan solo 47 años y apenas con 13 días del inicio de su mandato, cuando llegó al Uruguay el “Covid 19”, para hacer frente a dicha Pandemia, recurrió sabiamente a la Libertad Responsable de los Orientales, los cuales haciendo honor a las estrofas de nuestro Himno Nacional “Sabremos Cumplir”, cumplieron patrióticamente con el dramático pedido de su Presidente, lográndose el milagro que al poco tiempo en el caso casi único en América y gran parte de Europa, empezaron a funcionar las Escuelas y luego los Liceos y demás o Organismos de la Enseñanza, y más adelante empezaron a marchar las Obras en la Construcción, las Actividades Industriales y Comerciales, etc., encontrando hoy al Uruguay de pié, en pleno funcionamiento Humano, lo cual ha provocado el justificado asombro del Mundo, reconociendo para legítimo orgullo de la Ciudadanía Oriental, que el Presidente Lacalle Pou es de los mejores Estadistas del Planeta en conducir con todo esto a un País (Uruguay), en medio de la peor Pandemia de la Historia de la Humanidad, el Covid 19. Es muy trascendente destacar que en el Uruguay viven miles de Ciudadanos de otros Países, que se han visto gratamente beneficiados con la vida en el Uruguay a partir de Marzo 2020, hasta ahora, infinitamente mejor con la vida que hubieran desarrollado allí en sus Países de Origen lo cual, encajan perfectamente, en la exigencia de Alfred Nobel, para otorgar el Premio Nobel de la Paz, “a la persona que haya trabajado más o mejor en favor de la Fraternidad entre las Naciones”. Lo recién escrito, agrega un fundamento humano y jurídico más, y van… hara que mi propuesta del Premio Nobel de la Paz, año 2021, para ser otorgado a nuestro gran Presidente Lacalle Pou.

 Al respecto es muy oportuno recordar que en todos los Países de América hay graves situaciones de Violentas protestas populares, multitudinarias marchas de Indignados Ciudadanos por faltas de alimentos, medicamentos y por millones casos de pobreza extrema, en especial en estos días, en Chile, Paraguay, Argentina, entre otras Naciones, en especial el increíble caso de la Provincia Argentina de Santiago del Estero, la más pobre de Argentina donde recientemente se inauguró un espectacular Estadio Modelo de Fútbol con un Palco Presidencial digno para ser ocupado por la Reina Isabel, lo cual obviamente ha provocado un serio estallido popular. Gracias a Dios, nada de ella sucede en el Uruguay lo cual lleva a que nuestro País sea considerado Mundialmente un País Modelo en el medio del Covid 19. Antes de terminar esta misiva abierta cumplo con un mandato sagrado para mí, porque proviene de mi querido e inolvidable padre, “se debe ser agradecido en la vida”, y en tal sentido vaya mi más profundo y emocionado agradecimiento a todos los miles de ciudadanos que me expresaron su pleno apoyo a mi propuesta del Premio Nobel de la Paz, al Presidente Lacalle Pou y también a todos quiénes seguramente adoptaran idéntica conducta en el futuro después de leer está segunda carta. Termino la redacción de la presente misiva, igual como cerré la primer carta: “como Freviente Cristiano creyente pido todos los días a Dios, haga realidad la inédita y quijotesca proposición contenida en esta carta. Que así sea para felicidad de todos los Orientales. Dr. José Loinaz Barbosa teléfono 4442 2905

CAMPAÑA BUENOS AIRES VACUNATE - INFORME DE ACTUALIZACIÓN DIARIA

 



La Provincia vacunó 43.508 bonaerenses el 29/04/2021 El ministerio de Salud informa que ya se aplicaron 3.046.624 vacunas contra el COVID-19 en la Provincia de Buenos Aires, de las cuales 2.775.953 corresponden a la aplicación del primer componente, y 270.671 al segundo. A la fecha hay un total de 6.469.284 inscriptos para vacunarse; 1.289.438 casos activos; 12.208 casos del día y 32.820 personas fallecidas.

El consejo Asesor de salud del Partido de Zárate brindó detalles sobre la situación epidemiológica.

 


En una conferencia de prensa brindada en horas de la mañana de este viernes, participó el Secretario de Salud Municipal, Dr. Marcelo Schiavoni, junto a la Subsecretaria de estrategia sanitaria, Dra. Lorena Mattei. Este Consejo de salud de Zárate, creado por el Intendente Cáffaro, es integrado, además, por el Dr. Ariel Braida, médico infectólogo, el Dr. Gustavo Morán y el Dr. Daniel Mautissi. El Dr. Marcelo Schiavoni expresó, que: “los índices se miden cada 14 días, en esa última medición se vió una mejora en la tasa de incidencia, eso es alentador, pero sigue alta la tasa de positivos. 

Nosotros nos manejamos en sintonía con los epidemiólogos que asesoran al gobierno nacional y provincial, existe un protocolo y son tasas que se usan en todos los niveles para poder comparar cada lugar, las mismas se calculan cada 100 mil habitantes. “Para ser claros, hay una mejoría en la tasa de incidencia, no en la tasa de contagios, por la tanto somos muy precavidos, seguimos tomando las mismas medidas y trabajando fuertemente para que esto mejore y se logre bajar las tasas, reiterando que nosotros nos ocupamos de esa medición de tasas, pero también estamos muy atentos, día a día, al índice de ocupación de camas. Es imprescindible que no se sature el sistema de internación”. “Nosotros no necesitamos mentir en los datos, nos tomamos el trabajo muy enserio, esto es una realidad de una enfermedad que es mundial”. 

No hay necesidad de mentirle a la población señalo el Dr. Schiavoni, desmintiendo una nota periodística difundida en las últimas horas en un medio local que publicó fotos de lo que sería actualmente la atención e internación de pacientes COVID en el pasillo de la Clínica del Carmen. “Ese pasillo no es de la clínica del Carmen, la población está preocupada, atravesamos un momento difícil, esto no se hace”, manifestó Schiavoni. 

Los jóvenes pueden presentar sintomatología leve o pocos síntomas, pero son quienes portan el virus: “Los jóvenes se contagian, tienen pocos síntomas o sintomatología leve, pero son quienes portan el contagio y pueden poner en riesgo a su familia, a la persona mayor que es quien más se viene cuidando, lo pueden llevar en un almuerzo de fin de semana, una reunión familiar, etc. Es muy fina la línea de contagio cuando solo se cuida una persona y el otro no se cuida, debemos cuidarnos”, expresó Schiavoni. El Municipio colabora permanentemente con cada centro vacunatorio:

 Con respecto al trabajo del municipio en el marco de la campaña de vacunación, Schiavoni dijo: “Permanentemente tengo comunicación con los coordinadores, trabajamos en conjunto con las necesidades, el Municipio colabora permanentemente, ya que los puntos vacunatorios son provinciales y la regulación de la vacuna la impulsa la provincia. Nosotros aportamos siempre en la necesidad del día a día, cuando necesitan enfermera profesional, cuando falta alcohol, con sillas, con gazebos, lo que se necesite estamos a disposición y siempre lo resolvemos”. Finalizó el funcionario.

LA PROVINCIA DISTRIBUYÓ 300 CONCENTRADORES DE OXÍGENO EN HOSPITALES, UPAs Y CENTROS EXTRAHOSPITALARIOS

 De un total de 3 mil concentradores adquiridos 900 equipos ya fueron recibidos como parte de un plan de contingencia para ampliar la producción de oxígeno desde el sector público. Ya se entregaron 300 y 600 se empezarán a distribuir a partir de mañana.



El ministerio de Salud bonaerense completó este viernes la distribución de la primera tanda de un total de 3 mil concentradores de oxígeno adquiridos para fortalecer la provisión de este recurso vital en hospitales, UPAS y centros extrahospitalarios. Hoy se finalizó la entrega de los primeros 300 y 600 comienzan a distribuirse mañana para enfrentar a la segunda ola de Covid-19. La subsecretaria Técnica, Legal y Administrativa, Victoria Anadón, junto con el jefe de Gabinete de la dirección provincial de Hospitales, Agustín López, encabezó la entrega de este insumo vital para tratar a personas con Coronavirus. 

Los equipos entregados proporcionan oxigenoterapía a pacientes en concentraciones más altas que las del aire ambiente y mantiene estable el nivel de oxígeno en la sangre. “Hoy finalizamos la entrega de 300 y recibimos 600 más que ya se comienzan a repartir mañana mismo en hospitales provinciales, hospitales municipales -con quienes también colaboramos-, UPAs y centros extrahospitalarios, que estamos abriendo y acondicionando para poder soportar la tensión en el sistema de salud, que implica esta segunda ola”, aseguró Anadón durante la entrega en el hospital “El Dique” de Ensenada. 

 El director provincial de Hospitales Bonaerenses, Juan Riera, detalló que estos nuevos dispositivos son individuales y tienen un suministro infinito: “implican una tecnología que permite tomar el aire ambiente y administrarlo a los pacientes a mayores concentraciones de oxígeno para garantizar el acceso a este recurso indispensable en este contexto sanitario”. En tanto, López explicó que la distribución de los concentradores se realiza en forma equitativa teniendo en cuenta la densidad poblacional en donde se encuentran emplazados cada uno de los hospitales. “Con un criterio médico en el cual permite que todos los efectores puedan recibir esta tecnología para aumentar su capacidad en términos de tratamientos y optimizar el uso/consumo de oxígeno para los pacientes que sí requieran por su nivel de gravedad”, finalizó.

 Los concentradores son equipos eléctricos que cuentan una turbina interna y un procesador que toman el aire ambiente (que ya tiene una presión de oxígeno del 21%) y concentra el oxígeno a una fracción cercana al 90%. De esta manera, según el concentrador, puede ser utilizado para administrar el oxígeno a pacientes que requieren, como máximo, un flujo cercano a 5 litros por minuto o con otros concentradores, hasta 7 y 8 litros por minuto. El plan de contingencia para ampliar la producción de oxígeno desde el sector público incluye la instalación en las próximas semanas de 17 plantas móviles de oxígeno en las UPAs y una en Ensenada, que ya está en funcionamiento. Además, ya están produciendo las plantas en el Hospital San Roque de Gonnet que se sumó a la del Iriarte de Quilmes, que volvió a estar activa el año pasado. A estas acciones, se le incorpora la compra de 2 mil tubos para fortalecer el stock en los hospitales.

Comunicado del Departamento Ejecutivo Municipal.

 




Nuevas Medidas complementarias de Protección Sanitaria en el Partido de Zárate Teniendo en cuenta el dato positivo que surge de la estabilización de los índices de contagios, conforme a las estadísticas proporcionadas por la Secretaría de Salud. Y dado que dicha estabilización implica en forma categórica un freno al aumento que se venía registrando antes del ingreso del partido de Zárate a Fase 2, que se produjo como iniciativa del Ejecutivo Municipal, considerando además que es necesario orientar las decisiones políticas para obtener un descenso de los referidos contagios. 

El señor Intendente en reunión de gabinete con el objetivo de resguardar la salud y continuar protegiendo a nuestros vecinos y vecinas de Zárate, ha decidido implementar las siguientes medidas durante este fin de semana, que comenzarán a regir desde las 10:00 de este sábado 1 de mayo: -Controles de accesos en Avenida Lavalle, Antártida Argentina, e ingreso a Lima. En dichos controles se implementará la realización de Testeos Rápidos Aleatorios (Hisopados), a las personas que residan en otras ciudades y se dispongan a ingresar a zarate. 

Con esta medida no solo estamos protegiendo a nuestros vecinos ante el ingreso de personas probablemente portadoras del virus y evitando el contacto con ellas; sino que, además, ante un caso positivo, en lugar de ingresar deberán regresar inmediatamente a su domicilio en el que deberán cumplir con el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio Correspondiente. - Cierre al tránsito vehicular en Costanera. - Reactivación del Circuito Sanitario Recreativo. Días sábados y domingos, de 11:00 a 18:00. Nuestra intención es continuar cuidándote y protegiéndote, pero debemos seguir comunicando que necesitamos cuidarnos y protegernos entre todos, porque además del virus, debemos enfrentar otro enemigo que nos acecha, tenemos que luchar contra nuestro egoísmo e individualidad extrema y todos los sentimientos que nos impidan desarrollar la solidaridad indispensable para enfrentar la pandemia.

Avanza la obra de Plaza de Toros del Real de San Carlos

 


a Intendencia de Colonia entrega este video resumen de avance de obras de la Plaza de Toros Real de San Carlos correspondiente a marzo-abril 2021 (9a. entrega) Se destaca los timelapses de la colocación de las gradas. Link de descarga: https: //we.tl/t-i0BHEUkbo8

Así bajaron los cuerpos congelados de los andinistas perdidos hace 25 años: el estremecedor relato del hallazgo en la montaña

 

Fuente: Infobae

Juan Cruz Rodríguez, de 23 años, relató en una charla con Infobae cómo encontró los cadáveres de Roberto “Leroy” Villa y Nicolás Ibazeta en la cima del cerro El Plata, en Mendoza. Los andinistas habían partido a la montaña en junio de 1996. “Sentí mucho miedo cuando los vi, la montaña es un lugar muy hostil”, contó el joven autor Por Fernando Soriano 1 de Mayo de 2021 fsoriano@infobae.com Juan Cruz Rodríguez encontró los cuerpos congelados de Roberto Villa y Nicolás Ibazeta y el jueves una patrulla de rescate los bajó del cerro El Plata Juan Cruz Rodríguez encontró los cuerpos congelados de Roberto Villa y Nicolás Ibazeta y el jueves una patrulla de rescate los bajó del cerro El Plata Juan Cruz no estaba seguro de lo que veía delante suyo, un poco más arriba, al costado del sendero sobre el filo de la montaña. 

No tenía certeza de si aquello era producto de una alucinación como consecuencia de la altura, el frío y la falta de oxígeno, o era parte de una realidad demasiado cruel que lo espantaba al punto de paralizarlo. Llevaba 13 horas ininterrumpidas de escalada en el tramo final hacia el tope del cerro El Plata. Iba por el lado más complicado de la montaña que domina el Cordón del Plata, un sector al que pocos montañistas se le animan. Estaba a casi 6.000 metros de altura, a nada de hacer cumbre. Había caminado durante toda la madrugada, por momentos a 12 grados bajo cero. Casi pierde dos dedos de una mano por el frío. Tuvo detener la marcha y frotarlos durante media hora. De no sentirlos pasó a sufrir el dolor horrible que el cuerpo experimenta cuando se recupera la circulación, como pinchazos de mil agujas. 

 Así marchaba Juan Cruz cuando se topó con lo que primero vio como un “bulto”. Frenó, confundido, mientras aclaraba la visión, atrapada por la conmoción, en la soledad intimidante del techo de la Cordillera de los Andes: “Pensé que quizá me estaba volviendo loco porque de repente me encontré con el cuerpo de un hombre acostado en la nieve, que me miraba. No me daba cuenta si estaba teniendo una alucinación producto de la situación extrema, pero enseguida entendí que no. Era real. Y me dio mucho miedo”. “Sentí terror, hermanito”, dice a Infobae con tonada mendocina Juan Cruz Rodríguez, el andinista de 23 años que el domingo pasado mientras intentaba llegar hasta lo más alto de uno de los picos de la provincia de Mendoza encontró los cuerpos congelados de Roberto “Leroy” Villa (23) y Nicolás Ibazeta (22), dos jóvenes que en junio de 1996 (dos años antes de que el propio Juan Cruz naciera) desaparecieron durante una escalada y, ahora se sabe, murieron acurrucados en la montaña, probablemente como consecuencia del frío y el “sueño blanco” que invade a los montañistas en situaciones de tormentas de nieve y viento, frío y desorientación. 

 A pesar de que Juan Cruz ya había subido el cerro El Plata -por la otra ruta, la tradicional- no conocía la historia de Villa e Ibazeta. No sabía que eran los únicos dos andinistas que aun quedaban en la lista de los que jamás volvieron de esa montaña. Rodríguez estuvo no más de seis minutos frente a los cuerpos momificados desde hace 25 años, los miró con obsesivo detallismo. Era consciente de que tenía que recordar los colores y las marcas de los equipos que llevaban porque no tenía batería en su teléfono para sacar fotos y siguió hasta la cumbre. Pero ya nada iba a ser igual. Horas después bajó, contó lo que vio, un amigo guía de montaña le dijo que probablemente se tratara de ellos y entonces Rodríguez llamó a la oficina del fiscal Carlos Torres e hizo la denuncia. "Leroy" Villa y Nicolás Ibazeta, tenían 23 y 22 años cuando desaparecieron en la montaña, en junio de 1996 "Leroy" Villa y Nicolás Ibazeta, tenían 23 y 22 años cuando desaparecieron en la montaña, en junio de 1996 Al otro día lo llamaron de la Patrulla de Rescate de Alta Montaña de la Policía de Mendoza y el joven partió de nuevo al cerro para guiar a los rescatistas durante tres días de escalada hasta el lugar donde durante un cuarto de siglo los cuerpos esperaron que alguien los descubriera.

 Finalmente el equipo los bajó en camillas especiales a pie, por un tramo que demandó dos días, hasta llegar a una zona donde pudiera acceder un helicóptero. Los restos de Villa e Ibazeta fueron reconocidos por sus familiares en la morgue de la capital mendocina el jueves. Ese día, en ese momento, se desintegró el peso de la incertidumbre que habían cargado durante tantos años. El camino hacia el reencuentro con los andinistas perdidos comenzó para Juan Cruz el viernes de la semana pasada. Salió de su casa en colectivo hasta Potrerillos. Desde la base caminó ocho horas hasta que cruzó la laguna del Platita, en Los Morteritos, en el Cordón del Plata, ya a 4.100 metros sobre el nivel del mar. Pasó la noche allí y el sábado arrancó la trepada hasta la base de la cara sur del cerro El Plata, en la Quebrada de Casas, donde descansó la segunda noche. “La cara sur es la más jodida, la más expuesta y alejada”, explica Juan Cruz sobre su aventura. Él tenía la ventaja de que ya conocía el lugar, había estado y tenía todo estudiado. “Conozco bastante los tiempos, me conozco a mí mismo. Hay que encarar la montaña muy enfocado, pensando en el itinerario de la subida”, detalla. La organización y la concentración son determinantes.

 Cada minuto es importante para un montañista. “Si salís una hora tarde a caminar te agarra el sol y ya cambia las condiciones porque te derrite la nieve y podés morir en una avalancha”, pone como ejemplo. Por eso el último tramo Juan Cruz lo inició a las a las 4 am del domingo. Era de noche: “Salí a esa hora para aprovechar que la nieve está congelada y progresar más rápido y evitar avalanchas”. La naturaleza puede ser cruel en su búsqueda del equilibrio. La ventaja de un terreno sólido por la falta de sol era a la vez un problema: “Estuvo frío, sufrí bastante de frío, 12 grados bajo cero. Dos dedos de la mano ya no los sentía y no los podía mover y estuve un largo rato reanimándolos para poder sentir. Duele mucho eso”. Juan Cruz Rodríguez, en la cima de El Plata, donde encontró los cuerpos en la cima del cerro El Plata. Tiene 23 años. Cuando Villa e Ibazeta desaparecieron, él no había nacido Juan Cruz Rodríguez, en la cima de El Plata, donde encontró los cuerpos en la cima del cerro El Plata. Tiene 23 años. Cuando Villa e Ibazeta desaparecieron, él no había nacido La montaña exige al andinista desde todo aspecto. La fortaleza mental es tan importante como la capacidad aeróbica o la potencia de los músculos de las piernas o la capacidad para leer el clima. A las 8.30 salió el sol. Juan Cruz ya estaba a 5.500 metros. “Y la nieve se empezó a poner blandita y me tiré a la izquierda, al acarreo, a la pendiente de roca”, cuenta, porque en la nieve ya se hundía mucho y no podía caminar. La pendiente lo llevó al filo suroeste del cerro. El sector más complicado y hostil.

 El andinista caminaba lento, como si cada paso valiera una vida de energía corporal. Allí arriba el oxígeno es poco y vale como el oro. Eso provoca que la frecuencia cardíaca se acelere demasiado. Se camina despacio para no hiperventilar. Así iba Juan Cruz cuando se cruzó el primer aviso de algo extraño: la varilla de una carpa. Y luego, inmediatamente, un pedazo de tela en un lugar donde no hay más que nieve y piedra. “Me estaba cruzando con todo, me estaba chocando”, relata Juan Cruz, y la voz parece caer en un túnel vertiginoso, como si otra vez estuviera allá arriba. “Hice cuatro pasos y cuando miré para arriba vi que había una persona mirándome. Un bulto enorme de colores, y me di cuenta y caí en la cuenta de todo. La varilla, la carpa, el bulto. Eran personas congeladas, muertas. Y me dio mucho miedo. Me agarraba la cabeza, y no me la podía ni creer, parecía que me observaban”, contó. Atrapado por el estupor, Juan Cruz tomó valor y se acercó a los cuerpos.

 Me puse al lado y fue tratar de ver lo más que pueda, el equipo que tenían, las chaquetas, vi las marcas, busqué alguna insignia de un club andino, estuve un ratito, pero no los toqué, no quise tocarlos”, admite el joven, que sintió la aparición de los cuerpos congelados como un mensaje intimidatorio de la montaña: “Era una tremenda señal. Me estaba encontrando con dos personas muertas, lo interpreté como una señal”. El lugar donde encontraron los cuerpos congelados de los montañistas, a casi 6.000 metros sobre el nivel del mar El lugar donde encontraron los cuerpos congelados de los montañistas, a casi 6.000 metros sobre el nivel del mar Una hora y media después llegó a la cumbre. Era la primera vez que tocaba la cima de la montaña por la ruta más difícil. Pero Juan Cruz no podía parar de pensar en Roberto y Nicolás. “Estaban enteros, momificados. El frío los conservó, estaban los dedos, las piernas, los pies, las caras. Vi que eran jóvenes. Lo que más quería saber era cómo se llamaban, quiénes eran, qué vida habrán tenido. Habrán tenido sueños, como cualquier persona”, dice conmovido. Rodríguez llegó extenuado a su casa el domingo a las 21 y el lunes a la noche volvió a salir para la montaña por pedido del fiscal Torres. “Fue volver a ver la escena del terror”, comenta Juan Cruz. Caminó junto a siete rescatistas. Dos de ellos llevaban las camillas especiales. “Ellos estaban tristes porque los conocían, me agradecían, me decían ‘gracias, hermano, vas a dejar gente tranquila, en paz’. Cuando los encontramos se pusieron los guantes, yo no toqué nada, ayudé a bajar las camillas”. De la cumbre bajaron hasta la Quebrada de Casas, por el otro lado, el más “fácil”. Durmieron allí y al otro día llevaron los cuerpos hasta la laguna del Platito.

 Ya era miércoles. “Estábamos expuestos a avalanchas y buscamos un buen lugar para dormir”, cuenta Juan Cruz. La expedición de rescate terminó a las 2 de la mañana del jueves, cuando los rescatistas volvieron a la base del cerro. Ese día a las 10.30 un helicóptero levantó los cuerpos en la orilla de la laguna. “El cansancio fue letal, fue muy duro, estuvimos sin comida, con ganas de volver. Sufrimos mucho, fue muy duro”, comenta Juan Cruz. La frase corta indica la profunda conmoción. Una imagen del anochecer, sobre el filo de la cara sur de El Plata. La foto fue tomada por Juan Cruz Rodríguez para Infobae durante la expedición de rescate Una imagen del anochecer, sobre el filo de la cara sur de El Plata. La foto fue tomada por Juan Cruz Rodríguez para Infobae durante la expedición de rescate “Leroy” Villa y Nicolás Ibazeta eran jóvenes y tenían experiencia. A los 22 años, Villa había subido la pared sur del Aconcagua, el cerro más alto de toda América, una gesta que para los andinistas es como para un tenista ganar un Grand Slam. Quizás confiados en esa capacidad atlética y mental los jóvenes decidieron subir durante aquel invierno pleno de 1996, y tomaron el riesgo que siempre existe en la montaña. “Siempre asumís que puede pasar cualquier cosa. En este caso los chicos estaban en invierno. Las temperaturas se van a -25 grados, mínimo. Y sopla mucho el viento”, describe Juan Cruz, que se anima a conjeturar sobre el destino de Villa e Ibazeta: “Seguro los agarró una tormenta. Las condiciones climáticas, la altura, el frío, todo se junta y todo suma para que pasen esas cosas. Es muy extremo, la montaña mendocina en esos lugares es hostil, estás solo, alejado, sin comunicación, estás por tu cuenta.

 Quizás ellos en su época habrán tenido el equipo. Leroy tenía mucha experiencia. Nico también. Hay que saber mucho para mandarse al cerro Plata en invierno por esa cara. Es una decisión fuerte”. Al volver de traer los cuerpos, Juan Cruz habló con los familiares de los andinistas encontrados. “Estaban con un montón de cosas en la cabeza, felices porque se terminó la incertidumbre, muy agradecidos conmigo. Ellos ya no esperaban encontrarlos”, se emociona. La madre de Villa, que sufrió esa incertidumbre, ya no está para cerrar el círculo que permaneció abierto durante 25 años. “A las familias se les termina una tristeza enorme. Espero que ahora les venga paz y que puedan volver a recordarlos. Serán días de festejo”, dice el joven de 23 años. Mientras habla, una cicatriz invisible marca la historia de su vida para siempre. Es una de las formas humanas de crecer. SEGUIR LEYENDO: Un largo “sueño blanco”: dos cuerpos congelados en la montaña y el misterio de los andinistas perdidos hace 25 años

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