ZÁRATE, patrimonio de todos
MIRADAS HACIA EL PASADO ZARATEÑO
El 15 de septiembre de 2005 fue
sancionada la Ordenanza N° 3580 que declara de Interés Municipal el castillo de
la estancia “Santa Rosa”, uno de los ejemplos arquitectónicos más
significativos del patrimonio zarateño diseñado por el reconocido arquitecto
francés Eduardo le Monnier
“SANTA ROSA”: EL CASTILLO FRANCÉS
LLEGA A NUESTRO CAMPO
Entre las estaciones Lima y Atucha del ferrocarril
Mitre, y emplazada en medio de un parque diseñado sobre gustos paisajísticos de
la época con especies autóctonas y exóticas, se encuentra “Santa Rosa” la
significativa residencia construida a principios del Siglo XX -próxima a la
primera de líneas poscoloniales que data de 1870- por Juan Fernández y su mujer
Rosa Anchorena.
El casco de esta estancia conocido como el “castillo”
-denominación dada por los lugareños en abierta alusión a esta construcción que
por su volumen y arquitectura sobresale en relación a otros ejemplos del área
rural- fue concebido dentro de la corriente pintoresquista, en su vertiente
historicista medieval, a la que el autor incorpora motivos decorativos y
ornamentales antiacadémicos.
La casa presenta los recursos característicos del
estilo, con ejes quebrados de composición, trabajos de cromatismo y texturas,
composición aditiva de locales, aleros con armaduras de madera ricamente
adornados, cresterías ornamentales, delgados fustes de chimeneas y techumbres
múltiples entre las que se destaca -como elemento fundamental de diseño- la
escalera en una gran torre circular que, a modo de torre feudal, articula el
volumen de la capilla con el resto de la composición.
Este elemento, típicamente francés, es utilizado
plásticamente como núcleo simbólico-funcional dado que posee, al igual que los miradores
pampeanos, asociaciones defensivas en años en que ya la amenaza indígena había
pasado. El repertorio gótico también incluye empinados gabletes con florones,
contrafustes y arcos apuntados en la capilla, todos elementos propios del estilo neogótico.
La construcción es un típico exponente de la
arquitectura ecléctica que caracterizó el denominado período liberal en nuestro
país, inspirada en la vertiente clasicista de origen francés. Anexa a la casa
principal se levanta una capilla de estilo también neogótico compuesta por
volúmenes adosados, con cubiertas de pizarra, que rematan en una torre
campanario que vincula la capilla con el área residencial.
El lugar fue por varias décadas centro de intensa
vida social de la que participaban las principales familias de la zona. Desde
1963, el casco de la estancia -compuesto de dieciocho hectáreas de las poco más
de mil doscientas que comprendía la propiedad- pertenece a la Orden de los
Hermanos Menesianos por donación que realizara Doña Josefina Rosa Fernández
Anchorena, hija y heredera de Juan Fernández y Rosa Anchorena.
Este conjunto que comprendía las construcciones
descriptas y el jardín y parque circundante fue la primera obra de envergadura
que realizó el arquitecto francés Eduardo Estanislao Luis Le Monnier desde su
llegada a nuestro país, hacia fines del Siglo XIX.
El arquitecto Le Monnier nació en París el 30 de
septiembre de 1873. Cursó sus estudios en la Escuela Nacional de Artes
Decorativas de esa ciudad, graduándose en 1894. Se trasladó por ese entonces a
Brasil donde trabajó en proyectos para edificios públicos de la nueva ciudad de
Belo Horizonte y en 1896 llegó a la Argentina, donde comienza una activa labor
proyectando obras en la Capital Federal y en la provincia de Buenos Aires. Antes
de revalidar su título, en 1905, construye la Iglesia de la Sagrada Familia en
Haedo y la casa de Bartolomé Ginocchio, por la que obtiene su primer premio
municipal.
De su relación con la compañía “La Bola de Nieve”
surgen encargos en Buenos Aires y en Rosario, ciudad a la que quedó fuertemente
vinculado. Allí concretó viviendas, comercios y el Jockey Club. En Buenos aires
su producción fue muy amplia desde edificios de pocos pisos entre medianeras
hasta obras notables, como el Palacio Fernández Anchorena (propietarios en el
Partido de Zárate de la estancia “Santa Rosa”) en la Avda. Alvear y que hoy es
sede de la Nunciatura Apostólica. Con las construcciones del Banco Uruguayo y
las de la firma Bencich armó casi un conjunto urbano dentro de la, por entonces,
recién inaugurada Diagonal Norte.
Sus proyectos también abarcaron talleres, iglesias,
restaurantes, sitios de esparcimiento y deportes, dentro de los que se destaca
el Yacht Club Argentino. Ejerció su labor docente en la Escuela de Arquitectura
(1906-1915) y en la Academia Nacional de Bellas Artes. Este destacado
profesional, que cubrió una gran variedad de trabajos y un amplio espectro de
repertorios formales, murió en Buenos aires el 13 de abril de 1931.
Arq.
Silvia Irene Baccino
FUENTES
CONSULTADAS:
“CONOCIENDO EL PATRIMONIO RURAL DEL PARTIDO DE ZÁRATE. ESTANCIAS”. Silvia
I. Baccino - Sergio D. Robles - María
Luisa Sorolla. Colección Historia Urbana y Patrimonio de Zárate. Editorial de
los Cuatro Vientos. Buenos Aires, marzo de 2011.
Fotografías:
Arq. María Luisa Sorolla
Asociación Amigos del Museo de Zárate
Quinta Jovita
- Ituzaingó 278 - Tel. (03487)
422038