ZÁRATE, patrimonio de todos
MIRADAS HACIA EL PASADO ZARATEÑO
El 21 de mayo se cumplen 75 años de la inauguración del Colegio Nacional de Zárate -integra hoy la Unidad Académica Dr. José María Guerci- que fuera oficialmente creado a través del Decreto firmado el 25 de febrero de 1943 por el entonces Presidente de la República Dr. Ramón S. Castillo.
En esta MIRADA HACIA EL PASADO ZARATEÑO la propuesta es compartir apuntes históricos acerca de las dos sedes que, desde entonces y hasta la actualidad, constituyeron el ámbito físico donde tantísimas generaciones de jóvenes zarateños y, en muchos casos, llegados desde ciudades y regiones diversas se han formado y continúan haciéndolo
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EL COLEGIO NACIONAL DE ZÁRATE. LAS DOS SEDES Y SU HISTORIA
• Su creación
El 25 de febrero de 1943 el Presidente de la República Dr. Ramón S. Castillo firmaba el decreto de creación del Colegio Nacional de Zárate. Fue éste la culminación de varios años de esfuerzos iniciados en 1936 cuando gracias a la iniciativa del Dr. José María Guerci, entonces diputado provincial, se logró que los diputados nacionales Samuel Allperín, Miguel Osorio y Luis Grisolía ingresarán el proyecto de ley a la Cámara, convirtiéndose en sus auspiciantes.
El proyecto no se trató durante varios períodos legislativos y ello motivó que las fuerzas vivas de la comunidad zarateña iniciaran una activa campaña pro-creación del establecimiento.
El 29 de junio de 1939 se realizó un gran acto en el que hablaron, entre otros, Antonio Millán Ramos (h), Mateo S. Olmos, Antonio S. Gallesio y Pedro R. Gigena y al que asistieron, en calidad de invitados especiales, el Prof. Jacinto Cavenaghi y los diputados Allperín, Osorio y Grisolía.
Firmado el decreto de creación del Colegio Nacional y a fin de poner en marcha el mismo fueron designados el Cuerpo Directivo: Rector: Dr. Edmundo Guido; Secretario: Sr. Amadeo Tambussi y el Cuerpo de Profesores: Ciencias Biológicas: Dr. Edmundo Guido; Geografía: Pedro S. Gigena; Historia: Dra. Amanda Puidarrieux y Alberto N. Gauthier; Matemática: Ing. Atilio Pasqualini; Castellano: Dra. María Aurelia Tornesse Ballesteros de Guerci; Francés: Prof. María Rosa Nadaud; Inglés: Dr. Arturo W. Hotton; Música: Prof. Edith M. Hotton de Guerci; Dibujo: Prof. Edith Carlota Ceriotto de González; Escritura y Dibujo Lineal: Prof. Sara Eufemia Bou de Vigroux; Celadores: María Esther Richieri, Inés Cafferata y Jorge A. Olmos.
• La sede de la calle Belgrano al 700, un edificio de valor patrimonial
Cuando el 21 de mayo de 1943 comenzó a funcionar el Colegio Nacional de Zárate, los cursos se dictaron, por breve tiempo, en la Escuela Nº 10 porque poco después fue alquilado un inmueble en la calle Belgrano al 700, frente a la Plaza Mitre, para convertirse en sede del establecimiento. Sus habitaciones y patios se vieron poblados por muchos jóvenes zarateños que, a lo largo de cuarenta años, se formaron en ese establecimiento.
En sus orígenes fue una tradicional casona desarrollada alrededor de un patio central, con galería perimetral. Su fachada respondía a las pautas neoclásicas de basamento, desarrollo y remate, propias de la arquitectura impuesta en nuestro medio por la llegada de los primeros inmigrantes de origen italiano, hacia fines del Siglo XIX.
Albergó, luego, la Confitería del Progreso que fue fundada por Don Antonio Di Lázzaro y luego administrada por su hijo Enrique y por Arturo Di Lázzaro, ambos italianos naturalizados arribados al país en 1890 el primero y en 1908 el segundo.
Vista de la Plaza Mitre hacia fines de la década de 1910. Se destaca la cuadra de la calle Belgrano al 700 y entre las construcciones es posible distinguir la fachada de la Confitería del Progreso
Fueron ellos los que dieron al establecimiento un notable impulso a partir de 1909 y quienes resolvieron remodelar la fachada original en el sector correspondiente al salón destacándose en la composición de la misma, como elementos dominantes, la cornisa “liberty” y la marquesina que jerarquizaban el acceso y vidrieras de la Confitería. En su interior se distinguían las paredes revestidas con vidrios biselados, completándose su elegante decoración con mesas y sillas Thonet.
Fachada de la Confitería del Progreso. Década de 1910
A partir de entonces, y durante más de dos décadas, fue el sitio obligado para el encuentro social, cultural y político de la comunidad zarateña. Siendo, además, la cuadra de la Plaza Mitre entre 19 de Marzo y Justa Lima parte del recorrido de la “vuelta del perro” las veredas de la Confitería constituían un excelente mirador.
Las transformaciones urbanas de la década de 1930: la infraestructura de aguas corrientes y de desagües cloacales y la pavimentación de las principales calles, entre ellas Justa Lima de Atucha, significaron un importante cambio en el paseo de los zarateños, dado que el mismo se trasladó a las “modernas” cuadras céntricas quedando olvidado el veredón de la Plaza y perdiendo, por consiguiente, la Confitería del Progreso su poder de convocatoria.
Cerradas sus puertas el edificio fue sede, entre los años 1940 y 1942, del Club Argentino realizándose en ese entonces una nueva modificación de la fachada. Se colocaron dos amplios ventanales con rejas balcón, se realizaron nuevas molduras y se prolongó la cornisa “liberty” sobre la casa jerarquizándose el acceso a la misma con un parte de la marquesina original. El resto de la fachada continuó con su morfología de origen.
Refuncionalizado interiormente el edificio para albergar las actividades educativas mantuvo, en general, las características arquitectónicas de la fachada precedentemente señaladas, salvo en el sector derecho de la misma que fue deteriorándose con el paso del tiempo y la falta de mantenimiento.
Alumnos y profesores en el patio del viejo Colegio Nacional, en el edificio de la calle Belgrano
En el patio del viejo Colegio Nacional. En el centro la rectora del establecimiento María Aurelia Tornesse Ballesteros de Guerci y la profesora María Esther C. de Gemini. División 3° Ano Nacional
Alumnos, profesores y autoridades en la clásica foto en el patio del Colegio Nacional. Año 1967
En 1985, con la inauguración de la sede propia del Colegio Nacional, la casona de la calle Belgrano volvió a quedar en silencio, con un destino incierto. Adquirido luego por el Estado, el edificio fue destinado para albergar la Escuela Nacional de Educación Técnica N° 3, ex Escuela de Capacitación Obrera N° 81 y actual Escuela Técnica N° 3 Ing. Agustín Rocca.
Para cumplir con su nueva función se realizaron trabajos de puesta en valor: de ampliación de la planta funcional, de restauración del sector izquierdo de la fachada y de reconstrucción estilística del resto de la misma siguiendo los lineamientos generales preexistentes. Esta sede propia de la Escuela Técnica N° 3 fue inaugurada el 21 de noviembre de 1995.
Imagen actual del edificio patrimonial, sede propia de la Escuela Técnica N° 3
• El nuevo edificio
Durante muchos años fue un anhelo de los zarateños contar con un nuevo edificio para el funcionamiento del Colegio Nacional de Zárate. Los recuerdos del Arq. Gustavo Gemini, uno de los autores del proyecto y director de la obra del edificio propio, como así también la memoria descriptiva con los datos técnicos y sus vivencias personales permiten compartir desde esta MIRADA HACIA EL PASADO ZARATEÑO el largo camino recorrido por toda una comunidad para lograr el tan ansiado objetivo.
Impulsaron este anhelo las voluntades de rectores, cooperadores, exalumnos, intendentes municipales, senadores y diputados locales, ministros de educación y entidades intermedias, entre otros actores, hasta que se logró en la década de 1970 el primer objetivo: el terreno apropiado donde promover la construcción del nuevo edificio.
Es de destacar en esta etapa preliminar el tesón puesto para con la causa por quien fuera presidente de la Cooperadora durante muchos años: Don Remigio Rodríguez.
En ese entonces se detectó la posibilidad de adquisición de un lote gracias a los buenos oficios del Dr. “Chango” Gigena quien había conseguido que la CAP (Corporación Argentina de Productores de Carne) desglosara de la faja de tierras linderas a la calle Teodoro Fels un terreno ubicado entre las prolongaciones de las calles Justa Lima y Brown. La Cooperadora logró conseguir los fondos para su compra con muchos esfuerzos y actividades promovidas a tal fin, entre las que se destaca una campaña muy exitosa de venta de papel provisto por la comunidad. La operación inmobiliaria fue canalizada a través del Rotary Club de Zárate que, a través de la personería jurídica propia, con la cual no contaba la Cooperadora, pudo transferir el inmueble al Estado Nacional salvándose, de este modo, el primer obstáculo para la concreción del edificio propio.
Superada esta instancia inicial, el paso siguiente fue la formulación de un proyecto del futuro establecimiento. Reunida la Asamblea de Cooperadora se decidió la designación de los arquitectos Gustavo Gemini y Oscar Bigarella para desarrollar el anteproyecto. Hacia 1980 se iniciaron las tratativas con la Dirección Nacional de Arquitectura Educacional tendientes a la aprobación de la documentación gráfica e informes que sirvieran de base para elaborar el proyecto ejecutivo de la obra a realizar.
Durante esta etapa se incorporó al equipo de profesionales el Arq. Víctor Rosetti.
Durante los años 1980 y 1981 los arquitectos Gustavo Gemini y Víctor Rosetti desarrollaron el proyecto; también se llamó a licitación para la primera etapa consistente en la construcción de la estructura resistente de hormigón armado, que fue concluida hacia 1983.
La memoria descriptiva, en términos formulados por el Arq. Gemini, destaca los siguientes aspectos: “El partido arquitectónico adoptado responde a la idea de definir los distintos espacios contenedores de actividades educacionales a través de la articulación de las superficies cubiertas, semicubiertas y los patios conformados como resultado de la disposición de esas funciones.
De tal manera se dispone hacia el Norte (sobre calle Teodoro Fels) el sector de Escuela Primaria (Departamento de Aplicación) en dos niveles, balconeando el primer piso sobre un patio cerrado que oficia de Salón de Usos Múltiples. A modo de apéndice se incorpora sobre el acceso el cuerpo edilicio correspondiente a Educación Preescolar. Hacia el Este se desarrollan dos cuerpos de Aulas Comunes en un total de 14; al Sur se ubican, también en dos niveles las Aulas Especiales y Laboratorios.
La administración en una sola planta se vincula con los dos niveles de enseñanza, con el acceso y con el patio cubierto de secundaria (SUM) que a su vez se vincula con el patio abierto de secundaria.
Originalmente el edificio fue concebido para que su ingreso se efectuara por la prolongación de la calle Alte. Brown, a través de una plaza seca sobre la esquina con Teodoro Fels, luego de iniciada la obra, en subdivisiones posteriores efectuadas por el propietario original del predio (C.A.P) no se materializó la calle y hubo que replantear el acceso tal cual lo vemos hoy en día.
La concepción constructiva se basa en una estructura resistente de hormigón armado sobre una grilla de 3,6 x 3,6 m que resulta módulo de todas las funciones. Los cerramientos y tabiques divisorios son muros de ladrillo de pared doble para el exterior, simples en los interiores y doble muro acústico entre aulas. Las instalaciones eléctricas, de gas y de provisión de agua se desarrollan a la vista para facilitar su mantenimiento.
Publicación de la obra de la Escuela Nacional - Normal Superior de Zárate (El Colegio Nacional), con proyecto y dirección del Arq. Gustavo Gemini, en la revista SUMMA N° 218 de octubre de 1985, edición dedicada a Arquitectura Educacional
Primera etapa: Construcción de la estructura resistente de hormigón armado finalizada en 1983
En 1984 se inició la denominada “Primera Etapa de Completamiento” que consistía en la terminación del sector de la Escuela Primaria, pero que una vez concluida hizo posible que toda la escuela se trasladara a ese sector del futuro edificio que, por sí sólo, ya era más grande que sus instalaciones del viejo edificio de la calle Belgrano al 700, frente a la Plaza Mitre.
Aspectos generales de terminaciones interiores y carpinterías
Aspectos generales de terminaciones exteriores y carpinterías
El Arq. Gustavo Gemini recuerda que “El 10 de octubre de 1985 se inauguró el establecimiento en su primera etapa con el esfuerzo del Estado Nacional y mucho acompañamiento de la Cooperadora que organizó cuanto evento se pudiera hacer para conseguir dinero para afrontar los costos de la obra: “Campañas Solidarias (los alumnos con alcancía solicitaban la contribución de vecinos en las calles)”; “Corsos de Carnaval” (se llegó a contratar a la comparsa Mari - Mari de Gualeguaychú y la Municipalidad posibilitó que la recaudación fuera para la Cooperadora) y una “Gran Rifa”. La Cooperadora actuaba como entidad intermedia y administraba y rendía los fondos que le asignaba el Ministerio de Educación.
Era un periodo de inflación muy pronunciada y las variaciones de costos superaban el 10% mensual, por lo tanto, los pagos de certificados de obra se componían de lo básico, los mayores costos y las actualizaciones de los mismos; una parafernalia de papeles, reclamos y ajustes que hacían parecer la dirección de obra a una navegación en medio de un temporal.
Esa Cooperadora dirigida por Marta Cerra de Piris y con el invalorable apoyo de la entonces rectora Noelia Ayeno de Cirulli logró inclusive afrontar económicamente una etapa de financiación de ocho aulas en forma directa, sin aportes del Estado Nacional. Toda una proeza."
Sobre la elección de la fecha de inauguración el Arq. Gustavo Gemini refiere una interesante anécdota: “Ante la inminencia de la terminación de la primera etapa durante el año de 1985, la entonces directora de Arquitectura Educacional Arq. Ana Resnick Brenner le comenta a la rectora Noelia Ayeno, a la presidente de la Cooperadora Marta Cerra y al suscripto que tenía intenciones de realizar un acto para la inauguración de la obra y nos solicita entonces la sugerencia de una fecha.
En la reunión siguiente a la solicitud, mientras subíamos las escaleras del viejo edificio de la calle Las Heras, donde funcionaba la dirección, verifico en la pared del descanso previo a las oficinas de la Dirección una inscripción en la pared que decía “10 de Octubre - Día Nacional de las Construcciones Escolares”. Entonces me dije: si le propongo esa fecha seguramente aceptara. Y fue así que me di el gusto de inaugurar la obra el 10 de octubre de 1985. Ese día, mi primogénita Virginia cumplía 11 años. Como podrán entender, una satisfacción muy personal.”
Finalmente, en 1987 con una nueva licitación con respaldo del Estado Nacional concluye la “Segunda Etapa de Completamiento” alcanzando la edificación una superficie de 5.600 metros cuadrados.
Sin embargo, en esta etapa no estaban incluidos los solados de patios, accesos, estacionamientos, playones deportivos, tareas todas que fueron realizándose a través del tiempo con el aporte de las sucesivas Cooperadores.
Desde las gestiones previas iniciadas en la década de 1930 hasta la actualidad el Colegio Nacional -pese a su cambio de designación en los últimos años está en la memoria y sentimiento de la comunidad su nombre original- constituye el testimonio de la lucha y el compromiso de toda una comunidad para lograr primero su creación, luego su sede propia y siempre la búsqueda de recursos económicos y soluciones posibles para las acciones permanentes de puesta en valor que todo edificio requiere.
Arq. Silvia Irene Baccino
Fuentes:
Arq. Silvia Irene Baccino / Arq. María Luisa Sorolla. Era una vez… Zárate. Buenos Aires, julio de 1997
Arq. Silvia Irene Baccino. MIRADAS HACIA EL PASADO ZARATEÑO. Colección Historia Urbana y Patrimonio de Zárate. Editorial de los Cuatro Vientos. Buenos Aires. Abril de 2015
Testimonio y aporte de documentación gráfica y literal del Arq. Gustavo Gemini a la autora. Zárate. Mayo de 2019
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