La funcionaria, indicó, que apenas se inició la cuarentena, “y cuando aún los comedores permanecían abiertos, los chicos seguían yendo a desayunar, almorzar o merendar, pero cuando se extremaron las medidas, y ya en abril, por el aislamiento para evitar la propagación del coronavirus, iniciamos la primera campaña de distribución de alimentos”. “Seguramente en la última semana de abril haremos la última etapa de distribución, a la que se sumaron los jardines de infantes y tal vez, lleguemos a las secundarias, como la Técnica 1, en Zárate, y la Escuela 1, en Lima, porque hay mucha demanda, la necesidad es muy grande, y con la pandemia se extendió. Por eso el municipio tiene que llegar a donde se lo requiera, y más ante esta situación”, amplió. Vargas dijo que en breve comunicarán donde entregarán los bolsones, “para ello, ya estamos trabajando en la diagramación del cronograma de los días, el armado de las bolsas y los cuadernillos para que los chicos puedan estudiar”.
“En esta tarea, tratamos de entregar las bolsas con mercaderías, y al mismo tiempo los cuadernillos, para que el padre, el tutor designado o alguien de la familia pueda retirarlos una vez y así contribuir con la poca circulación de la gente en las calles. Cada escuela tiene su grupo de WhatsApp, en donde se comunican los directivos con los responsables de los alumnos, pero en caso de que no accedan, los docentes y el cuerpo directivo, se las ingenian para llegar hasta la casa de los chicos. Hay mucha cercanía entre la gente y el Consejo Escolar ante esta situación”, aclaró Vargas. También se refirió sobre la logística que llevan adelante, “todo depende del stock que tengamos, por ejemplo, en la primera quincena de abril, entregamos 6432 bolsas, y en la que viene, calculamos, que se otorgarán unas 8000. Aquí hay que remarcar el fuerte compromiso del Estado, que arranca desde el presidente de la Nación, pasa por el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia de Buenos Aires y el Municipio, que es finalmente, quien llega al territorio”, precisó. La funcionaria contó sobre los bolsones, que se arman por medio del Servicio Alimentario Escolar (SAE), y “están provistos de alimentos no perecederos, como lentejas, fideos, puré de tomates, azúcar, arroz, harina de maíz, harina, entre otras mercaderías.
También les cuento a la población que, por la llegada de las Pascuas, algunos padres, hicieron huevitos de chocolate para los chicos, y ya fueron entregados”, amplió. Hay mucha solidaridad de los docentes y los directivos de los centros de educación del partido, “por ejemplo, hay que destacar que la directora del Centro de Estimulación Temprana (CEAT), una vez que recibe las bolsas, se va a Lima y con la gente de la Delegación Municipal, llevan las mercancías casa por casa, algo muy digno”, contó Vargas. “Es una tarea muy silenciosa y se trata de que nadie quede afuera. En la Escuela 17 de Lima, se entregan viandas, que incluyen a vecinos en estado de vulnerabilidad. La Escuela Pública, muchas veces cuestionada, hay que destacarla, y sobre todo a los docentes que ahora están haciendo una obra descomunal, como también los compañeros del gremio SUTEBA, que han cocinado en las escuelas 36 y 15 de Zárate”, comentó Vargas.
“Así, como es gratificante que la Técnica 3 y la Escuela 1, hayan puesto sus instalaciones para que los adultos mayores esperen y estén contenidos en vez de estar haciendo colas a la intemperie, para cobrar jubilaciones y pensiones, y todo gracias al esfuerzo de las instituciones educativas públicas. Por último, les pido a los padres o familiares que ven que sus hijos no reciben las bolsas de mercaderías, que se acerquen a las escuelas, y alguien los va ayudar”, concluyó.
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