MONTEVIDEO (Uypress) — Finalmente los cuatro socios fundadores del MERCOSUR resolvieron no permitir que Venezuela asuma la presidencia del bloque y le otorgaron un plazo hasta el 1º de diciembre para que cumpla los requisitos para ser miembro pleno.
En lo que aparece como un triunfo de la nueva diplomacia brasilera encabezada por José Serra, los cuatro socios fundadores del MERCOSUR - Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay- resolvieron compartir la presidencia pro témpore del bloque y dar un plazo a Venezuela, hasta el 1º de diciembre- para que cumpla con los requisitos para convertirse en miembro pleno. Caso contrario, será suspendida.
Los cuatro países tenían posiciones diferentes sobre la decisión a tomar respecto a la presidencia del país bolivariano.
El canciller brasilero José Serra publicó en Twitter que "finalmente solucionamos el impasse en el Mercosur (...) Los cuatro países fundadores -Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay- aprobaron hoy una nota de consenso por la que Venezuela no asume la presidencia del bloque, que a partir de ahora será ejercida por una comisión coordinadora conformada por un representante de cada uno de los fundadores".
Venezuela disponía de un plazo de cuatro años para adecuar su normativa nacional a las exigencias del MERCOSUR y así completar su adhesión. El plazo finalizó, sin que se cumplieran los requisitos, el pasado 12 de agosto. De acuerdo a un comunicado emitido por la cancillería paraguaya, Venezuela no ha avanzado en la adopción de estas normas, ni tampoco ha suscrito el tratado sobre promoción y protección de derechos humanos en MERCOSUR firmado en 2005 en Asunción.
La integración de Venezuela al bloque regional se produjo en el año 2012, en momentos en que Paraguay se encontraba temporalmente suspendido como consecuencia de la destitución del presidente Fernando Lugo en un juicio político.
La iniciativa para apartar a Venezuela de la presidencia fue de Argentina, Brasil y Paraguay, en tanto que nuestro país se abstuvo, habilitando la aprobación.
Uruguay había dejado la presidencia del MERCOSUR en julio, al terminar su mandato, y fue asumida por Venezuela, aunque Brasil y Paraguay se negaron a aceptarla, lo que generó la crisis consecuente.
El texto pactado por Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay señala: "Esta declaración refleja el consenso alcanzado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay para facilitar el funcionamiento del MERCOSUR y para coordinar las negociaciones con otros países y grupos de países, así como los pasos a seguir para asegurar el equilibrio de derechos y obligaciones en el proceso de adhesión de Venezuela, atento a que este país no ha incorporado normativa esencial del MERCOSUR en su legislación nacional. Por este motivo, se decidió otorgar un plazo complementario a fin de que la República Bolivariana de Venezuela de cumplimiento a las obligaciones asumidas en su Protocolo de Adhesión al MERCOSUR".
La situación entonces se complica en la interna del bloque, ya que, además, Venezuela rompió sus relaciones con Brasil luego de la destitución de la presidenta Rousseff.
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